Rock Estatal Records © 2018

Tracklist:
01. Darkness Call
02. While Sleeping
03. Cain's Dynasty
04. Fire and Faith
05. Two Seconds to Forget the Pain
06. The Shadow of the King
07. The Witch of Blood and Lust
08. Towards Loneliness
09. A Man Asking the Universe
10. Regression

El nombre de Cain’s Dinasty me sonaba de algún lugar y buscando información me he encontrado con que es la banda del vocalista Rubén Picazo. Y escuchando la música, no llego en un primer momento a ubicar a Rubén, y no sé si es el de la voz aguda, el de la voz normal, el de la voz gutural, o el de la voz femenina. Venga, que esto último es broma. Cada canción especifica quien canta y aunque Rubén tiene un amplio registro, ha invitado a algunos cantantes que han agregado sus voces dando como resultado general un disco donde las voces tiene gran importancia. 
 
Aunque tuvieron disco en el 2015 este no nos llegó. Parece que no nos conocíamos mutuamente. Ahora con Rock Estatal las cosas cambian, estos sí que se preocupan, por promocionar a las bandas. Y es Cain’s Dinasty una banda que se define en su página de Facebook como una banda de power metal aunque por ahí mismo también se catalogan como Vampiric Metal. Y esta etiqueta les pega más, teniendo en cuenta que la banda utiliza muchos recursos y variados, pero la temática lírica tiene mucho que ver con la fantasía, el ocultismo y lo onírico.

Atmósferas oscuras y sonidos, arropan una música que a medida que escuchas se va tornando muy interesante. Incluso algo de Horror Metal podemos encontrar. Sonidos oscuros que no plagan todo el álbum pero que aparecen convenientemente en muchas partes. No será esa la opinión cuando la primera pista que aparece, “Darkness Call”, con Débora Blanco (que es quien hace la voz cavernosa) es puro power metal de corte alemán con inserción de voces guturales. La letra me recuerda al manga japonés Vampire Hunter D, que si no lo has visto lo recomiendo.

Hay cierto carácter cinemático en la música de Eva, “While Sleeping” también tiene mucho de power metal, también con Débora como contraparte. Aquí ya agregan algunos detalles orquestales, y para Cain’s Dinasty comienza a haber un ligero cambio dado no solo por el tempo de la canción sino por el uso del piano como instrumento central y dramático.

“Fire and Faith” es mucho más agresiva y por momentos nos recordará a los Cradle of Filth menos sangrientos por una parte y las discos conceptuales de King Diamond por la otra. Algo que se repetirá en varias pistas del disco. En la número cinco, “Two Seconds to Forget the Pain” descubro que algo que no me suena bien son los timbres agudos de las guitarras y alguno de la voz. Cuestión personal, lo sé. Como tampoco le encuentro mucho sentido a la velocidad de “The Shadow of the King” donde me parece que la música no sigue a la prontitud marcada por la batería y guitarras.

Contrastan con la belleza de “The Witch of Blood and Lust”, una pieza que se desenvuelve en varios tiempos musicales, cargada de matices, y donde Oscar Sancho hace de Inquisidor. Comienzo a darme cuenta que cada canción es totalmente diferente y se ha perdido aquel power metal inicial en favor de elementos de metal progresivo y música más extrema en todos sus estilos. “Towards Loneliness” tiene una orquestación muy presente y el trabajo vocal llega a cotas realmente altas.

La entrada de “A Man Asking the Universe” pronostica una canción oscura, también alguna influencia de Iron Maiden podemos encontrar en el disco. Terminan con la poesía de “Regression” en lo que pudiera ser una balada algo sui generis, por el agresivo trabajo de guitarras que sacude por momentos la quietud de la línea vocal o la batería desbocada a partir de la segunda mitad.

El disco fue grabado, mezclado y masterizado en los Fireworks Studios de Valencia con las colaboraciones musicales de Débora Blanco (ex-Mortis Cruentus), Oscar Sancho (Lujuria) y Sophie Laporte (Afterlife), Arturo Megamuerte (Raven's Gate), Hisaya Sassa (Alligeance Reign) y artísticas de Pablo Fernández (Ferdez) y Angel Sanchez. De verdad, echo de menos una producción más prístina. Aparte de ese matiz, el disco es toda una obra musical y literaria. Un CD para escuchar varias veces e ir descubriendo matices nuevos. 

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