Napalm Records

Track list:
01. Winter Woede
02. Herboren In Vlammen
03. Urth
04. De Hallen Van Mijn Vaderen
05. De Vervloekte Jacht
06. Het Dwalende Licht
07. Drankgelag
08. Velua
09. Een Met De Storm
10. Richting De Wievenbelter
11. In Het Diepst Der Nacht
12. Vinland

Quinto álbum de los holandeses Heidevolk y su descarga habitual de Pagan/Folk Metal, primer disco ya sin su cantante original Joris Boghtdrincker (abandonó la banda en 2013) reemplazado por Lars Blahrafn, quien curiosamente hace que la ausencia de Joris casi ni se note!

Lo que nos ofrecen en esta oportunidad es un álbum conceptual que cuenta una historia inspirada en las leyendas de los bosques Veluwe, famoso por sus historias de apariciones y desapariciones atribuidas a seres mágicos y malignos como duendes, hadas (si, no todas son como Tinkerbell!) y demás espíritus inquietos. Las 12 canciones de ¨Velua¨ si bien no tienen ese encanto e impacto inmediato de sus anteriores entregas tampoco decaen en absoluto. Están las voces graves barítonos y gélidas a dúo, los riffs y machaques duros, las melodías y solos contemplativos que te transportan a los más espesos y oscuros bosques, las bases competentes y no tan cambiantes, todas con esporádicas intervenciones de violines y teclados como la apertura de Winter Woede, el ritual pagano de De Hallen Van Mijn Vaderen, la tristeza oscura de la marcha lenta de Velua, el místico y hermoso comienzo acústico de la dura Richting De Wievenbelter, el sentido épico de la machacona y oscura In Het Diepst Der Yacht, y el final con la inquieta y desafiante Vinland cierra la historia de manera más convincente posible.

La producción del disco es nivelada y cristalina, pero que le otorga ese sonido oscuro, gélido y místico tan característico de los holandeses. Si bien no es un trabajo memorable para estos monjes paganos ni estará entre lo más destacado del año muestran a Heidevolk con su propuesta firme y haciendo eso que tan bien les sale, que seguro alegrara a sus fans y a aquellos que quieran entrar a este oscuro bosque encantado. Lo cual no es poco.

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