Maldito Records © 2015

Track list:
01. Matheria Act. I
02. Creation of the sun
03. Blinded by rage
04. Rebel
05. Live in winter
06. The farewell parade
07. Rise
08. Requiem
09. Renaissance
10. Matheria Act. II

Childrain acaba de sacar su cuarto disco, una obra conceptual llena de fuerza.  Metal fresco y moderno, cultivando un estilo que debería abundar más en España, y que se nutre de influencias que van desde Metallica hasta Lamb of God, aunque en 'Matheria' hay más de los segundos que de los primeros.

Trallazo tras trallazo, el grupo demuestra que cada región del estado tiene su propio estilo, y aquí suena vasco aunque canten en inglés. Suena a otras influencias, suena alejado del metal del centro del país.

Después de par de canciones que introducen con fuerza a la banda, encontramos en “Blinded by rage” un solo de guitarra heredero de la tradición metalera que nos descoloca momentáneamente, pero que resulta magistral, y cuya fórmula se repetirá con más o menos sistematicidad en otros momentos como “Live in Winter” y también en “Rise”, con la larga sombra de Iron Maiden de la época 'Killer' que se aprecia en el solo de guitarra.

En “Rebel” las dos guitarras repiten la misma melodía al estilo más apegado a Pantera que recordamos, y un contrapunto entre una voz gutural y una clara, ambas masculinas, que se irá repitiendo a lo largo del disco como seña de identidad de la banda. Y es que influencias encontraremos muchas, muy bien aprovechadas y diluidas en la música.

'Matheria' es un disco conceptual sobre el recorrido del ser humano a lo largo de la vida. El título es una combinación entre Math (matemáticas) y Materia. El concepto está en las letras más que en la música, al menos en una primera escucha, aunque las guitarras atmosféricas del inicio del fonograma evocan la creación del ser humano previa a la gestación.

Las letras están abordadas desde una perspectiva metafísica, como la propia discográfica apunta, pero no es fácil seguir el concepto incluso conociendo el idioma.  Sin embargo, nos damos cuenta de que los versos tienen un toque pesimista muy típico de esta área geográfica. Esto no impide el disfrute, los timbres vocales se alternan y hay momentos en los que nos llegan a recordar al loco vocalista Devin Townsend en “The farewell parade”. Los timbres de las guitarras también están cuidados al máximo, dando un toque más agresivo.

La batería, a cargo de Mikel, nos llama la atención, hay momentos de velocidad inhumana, y nos gustaría ver a la banda en directo solo por ver como se supera esta celeridad.

Si bien antes decíamos que la música no se imbricaba tanto dentro del concepto del disco, en la parte final con “Renaissance” resulta evidente la utilización de la música para fortalecer, enlazando con “Matheria Act. II”, con un cierre natural, a piano, el fin de una vida, el retorno del alma a su estado primigenio con mucha fuerza.

El disco fue producido, mezclado y masterizado en los Cynik Studios por el propio guitarrista, Iker Bengoa. Las baterías fueron grabadas en los Your Sound Recording Studio. Magnifica banda y magnifico disco donde hay tanta energía como en el propio universo.

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