Combat Records / EMP Label Group (SPV) / Rock and Growl © 2018

Track listing:
1) Unraveling Existence (Intro)
2) Silent Genocide
3) Desire for Oppression
4) Illusions of Hope
5) Warsaw
6) Where Futures Regress
7) Back Into Dust
8) Final Sanctuary
9) Descent Into Madness
10) Oblivious to Disorder
11) Hail to the Lies
12) World in a World

Cuarto disco de Hatchet manteniendo como siempre la bandera del Thrash de la Bay Area. Un disco intenso como los anteriores, de un grupo que puede ser considerado un hermano menor pero aventajado de aquellos grupos como Exodus y Testament. Y digo hermano menor pero no se segunda fila, pues a pesar de la juventud de Hatchet comparado con sus hermanos mayores, la banda ha girado por doquier con el resto de la familia thrashera de la Bay Area y muchos músicos más.

El vocalista y guitarrista Julz Ramos nos dice que es el disco más veloz que han hecho hasta ahora.  En la familia Combat, también su jefe, David Ellefson de Megadeth los define como Thrash Metal agresivo y moderno, sumando la intensidad tradicional.

Escuchando el disco encontramos como algo muy positivo el hecho de que sus canciones no nos recuerden a la vieja escuela del thrash. El sentido americano del estilo está presente, pero las armonías son modernas. Hay momentos en que nos damos cuenta de que si en vez de tocar la secuencia de notas a toda velocidad lo hicieran de manera más lenta y con otro acompañamiento de batería, fueran canciones de heavy metal o incluso hard rock. La banda ha llevado la velocidad como sello y el resultado es una colección de canciones enérgicas e igualmente energéticas.

Por otra parte la producción es la que habitualmente escuchamos en los discos de thrash. Los timbres por momentos nos recuerdan a los queridos Angelus Apatrida e incluso he llegado a pensar que pistas como “Where Future Regress” muy bien podían estar en un disco de los españoles más thrasheros de este planeta.

Si es cierto que Hatchet sigue utilizando los clichés de siempre: los riffs acelerados, los interludios que terminan en una velocidad más acelerada aun si cabe, los coros pregunta-respuesta, los solos de guitarra por momentos erráticos; pero también tienen el sello propio en el trabajo de los solos de guitarra, mezclando melodías y arrebato, o la utilización de un riff sencillo a manera de mantra hipnótico como ocurre en la ya mencionada “Where Future Regress”.

De ningún recurso abusan, así van alternando momentos más complejos con otros más simples y si algún detalle podría ponerles a manera de defecto es el hecho de que siento que la batería se ha grabado con menos graves de los que me gustaría haber escuchado. También es esta otra característica de muchos discos de thrash, aquí no se han modernizado tanto.

El resultado final es una colección de canciones que te “dan más alas” que el Redbull, y si te gusta el Thrash, ya sabes lo que debes escuchar.

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