Viernes 4 de octubre 2019
Escenario Santander, Santander.

La visita de una figura tan ilustre como Graham Bonnet siempre resulta interesante, al menos para un fan como yo. Pero de verdad no entendí mucho porque desenterrar Alcatrazz, si ya anda girando y grabando como Graham Bonnet Band y en esta gira no solo venia cantando canciones de Alcatrazz, supongo que usarlo como gancho para atraer a más público potencial. En esta aventura musical le acompaña el teclista Jimmy Waldo que fue miembro fundador de los Alcatrazz, la bajista Beth-Ami Heavenstone, el batería Mark Benquechea y el súper guitarrista Joe Stump, todo un acierto musicalmente.

Nos fuimos a Santander y pensamos que habría una mejor audiencia esa noche, pero creo que no llegaron a 140 personas. Abrían la velada los londinenses Evyltide, una banda formada en 2013 con tres álbumes de larga duración publicados, el más reciente 'Singularity' de este mismo 2019. Tocaron unos 40 minutos y les dió tiempo para 9 canciones, de las que poco se pudo salvar.

El cuarteto no gozó de un buen sonido y que su heavy metal a veces intentando sonar clásicos y a veces modernete, no conectó con el escaso público que estaba a esas horas en el recinto. Esa dualidad es su sonido no facilita la digestión de unos temas que me parecieron faltos de gancho. No son jóvenes  ni recién llegados, y la vocalista me pareció bastante floja. El guitarra despachó algunos solos interesantes y salvaría de la quema al bajista. Muy justos van estos Evyltide, les veía sobre el escenario y pensaba en la cantidad de bandas europeas y españolas que podrían cumplir mejor el papel de teloneros, pero les tocó a ellos. En resumen, de lo más aburrido que he visto este año en directo.

Cuando se anunció hace unos pocos días que Grahan Bonnet tenía que pasar por el quirófano para una operación de espalda, sinceramente pensé que este tour peligraría, pero me equivocaba, este hombre es irreductible. Allí estábamos esperándole, un flight case y una banqueta eran la señal que el hombre estaría sentado una buena parte del concierto.

Los músicos subían al escenario y tomaban posiciones ante el aplauso del respetable. El último en subir fue el tío Graham, con mucha dificultad le vimos acompañado de alguien de su equipo, se sentó en la silla para explicar que tendría que cantar buena parte del concierto sentado. Y que esa noche le dolía mucho más la espalda, la verdad es que se le vio muy incómodo en varios momentos de la noche. Sorprendió también verlo con una camiseta de Alcatrazz, el que siempre va con camisa y corbata. Detalle que comento diciendo “No estoy acostumbrado a llevar camisetas de mis grupos”, pero allí estaba, dándolo todo a pesar del dolor.

Comenzaron el concierto con cuatro piezas del álbum 'No Parole From Rock ‘n’ Roll' de 1983, temazos de un disco imprescindible en su carrera, "Too Young To Die", "Too Drunk To Live", "Hiroshima Mon Amour", "Jet To Jet" y la maravillosa "Kree Nakoorie", imposible no emocionarse con semejante pieza. El hacha Joe Stump estuvo intratable durante toda la velada, toca mucho este hombre, no descubrimos nada nuevo. Tiene una carrera que le avala, aunque para algunos su estilo recuerde muy, mucho al del sueco Malmsteen. Te puede gustar o decir más o menos su estilo, pero el hombre toca mucho y no se me ocurre mejor banda para el, encaja como un guante.

No podía faltar “All Night Long” de Rainbow, en esta como en algunas otras, Joe ponía la pose típica de Blackmore que luego siguió Yngwie, rodilla en tierra y pierna estirada. Fue uno de los temas mejor recibido de la noche. Dos canciones de su etapa con Michael Schenker, hablo de “Desert Song” y “Rock You To The Ground”; en la que Joe Stump ofreció un interminable solo en el que sacó humo al mástil festoneado de su ESP. Mientras Graham se sentaba en la tarima de la batería, supongo que buscando un poco de alivio para su espalda. Ah entre medias tocaron "Night Games" de su etapa en solitario.

De Impellitteri "Stand In Line", con otro espectacular solo de Stump, muy parco y apenas podíamos verle la nariz y la boca. Bonnet anuncia "General Hospital" y suenan los teclados de Waldo, durante esta pieza estuve a 3 metros de Graham y se le escuchaba sufrir para alcanzar las notas altas, aunque algunos colegas me decían que por el PA se escuchaba de puta madre. Hubo muy buen sonido en todo el concierto y en algunos momentos los coros me parecieron grabados. Lo mismo que la voz de Graham en momentos puntales, creo que vocalizaba demasiado y para ponernos más la mosca tras la oreja, cuando terminaba un tema y quería hablar, no se escuchaba su voz. Igual estoy siendo injusto o nos la han colado, pero cuento lo que viví desde mi modesta posición.

Ni las dudas que puedan existir pueden como un clásico básico como "Island In The Sun", así que a disfrutar y cantar mientras prestamos atención a toda la banda, otro impecable solo de Joe y no quiero dejar de mencionar al batería, Mark Benquechea, que estuvo inconmensurable toda la noche. Qué bueno es este tipo. De temazo en temazo, otro calificativo no tiene "Since You Been Gone". De lo mejor de la noche, los pelos como escarpias. Aunque no menos impresionante fue “Leviathan” de Impelliteri, en la que se volvió a lucir Stump y la voz de Bonnet sonó ultra potente, no me esperaba a esas alturas, igual la pieza más exigente de la noche, al menos vocalmente. Pero todo puede ser.

Hubo otro guiño a Impelliteri, con “Goodnight And Good Bye”. Graham presentaba "We Won’t Be Forgotten" una pieza que dijo había compuesto junto a Jimmy Waldo cuando militaron en Blackthorne. Se despedían con “Long Island Tea” otra canción de su carrera en solitario, del álbum 'Meanwhile, Back In The Garage' de 2018. Les quedó muy bien.

La banda bajaba del escenario, pero a Graham le fue imposible, así que volvió y se preparó para cantar de pie los bises, "Assault Attack" de MSG y "Lost In Hollywood" de Rainbow, ambas sonaron muy organizas en directo. Cerrando de esta forma una velada de una hora y 45 minutos de duración en los que repasó su brillante trayectoria musical, que esperamos pueda retomar en cuanto sea operado y vuelva a ponerse en forma. Le deseo que le vaya bien la operación y que podamos verle dando guerra muy pronto.

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