Rockshots Records © 2020

Tracklisting:
01 - Into Glory
02 - Forgiveness
03 - I Will Come For You
04 - Say Forever
05 - Eyes
06 - In My Heart
07 - The Raven
08 - First And Last
09 - On The Edge
10 - Far Above
11 - End Of Times
12 - Moon Reverie Suite

Nace una nueva banda de rock neoclásico, Moon Reverie. Sin embargo es una banda que se formó en el 2012 por el virtuoso guitarrista italiano Luca Poma, quien ha trabajado como guitarra de apoyo en las bandas de guitarristas tan grandes como  Uli Jon Roth, Kee Marcello (Europe), Vinnie Moore, T.M. Stevens (Miles Davis, Steve Vai, Tina Turner), Graham Oliver (Oliver-Dawson Saxon/ Saxon) y muchos otros.

Con todo ese bagaje, Luca decidió finalmente grabar sus propias canciones influenciado por la escena del rock neoclásico de los años ochenta, dándole a las piezas un toque barroco. Estas composiciones que aquí escucharas, han sido tocadas por la banda durante años, pero siendo el proyecto de Luca, presenta cierta intermitencia y quizás es este el momento de defender la continuidad.

Escuchándolo en este disco, te vendrán a la mente las influencias de tres guitarristas universales: Yngwie Malmsteen, Tony Macalpine en su etapa Shrapnel Records y Vinnie Moore de la misma etapa. De hecho este último ha dicho de Luca que “es un guitarrista ninja que siempre está en modo ataque”. También encontramos en Luca Poma un toque similar al de Luca Sellitto, su compatriota de Stamina aunque más que estar influenciados el uno por el otro, pienso que ambos beben de la misma escuela.

La música también va por esos caminos casi olvidados. Hay piezas como “Stay Forever” tienen el timbre de teclados del “You Don´t Remember, I’ll Never Forget” que cantaba Joe Lynn Turner con el ego-sueco Malmsteen. De hecho la banda ha cuidado los timbres de teclados para que suenen al momento en que el metal neoclásico surgió. Las canciones tienen un cierto amago de modernidad pero son piezas que han nacido treinta y cinco años después del momento en que en realidad hubieran sido muy valoradas. La banda trabaja las melodías y los estribillos a la perfección para dar el gancho que te pondrá a cantar. 

La banda ha cuidado de mantener varios tiempos musicales, canciones más veloces y otras más lentas, momentos de doble bombo y momentos más bucólicos, pero casi todas tienen un instante shredder de alta velocidad que demuestran que Vinnie Moore tenía razón. Los amantes del rock de los años ochenta, los guitarristas acelerados y el metal neoclásico disfrutaran muchísimo con esta obra.

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