Durante una década no supimos de Pure Reason Revolution. En el 2010 reseñamos 'Hammer And Anvil' y nos perdimos su posterior EP. Pensábamos que la historia había terminado y sin embargo aquí están, frescos y lozanos, como si hubieran pasado 10 días. 

Aquella banda que comenzó haciendo un progresivo de corte clásico que gustaba lo mismo a los fans de Pink Floyd que a los de Muse o Tool, fueron cambiando a terrenos más electrónicos y ahora el regreso los muestra como si volvieran a su primera etapa.

La distancia en tiempo les permitió ver las cosas de una manera diferente. El resultado son seis canciones donde hay un ochenta por ciento de pop y un veinte por ciento de prog, mezclado en la mayor parte.

Las voces son elegantes y cuidadas. Y cuando decimos pop nada tiene que ver con las canciones fabricadas por decenas con ritmo de baile o preocupaciones juveniles. Pudiéramos definirlo como Pop Progresivo y también música para adultos intelectuales. Casi todas las canciones tienen una tranquilidad musical que en algún momento se rompe provocando cierto caos. La primera que lo hace marcadamente es la segunda pista, “Silent Genesis” que en sus 10 minutos permite que la locura también se desarrolle.

Aunque no esté en la foto, un gran papel en el desarrollo de este disco lo tuvo el guitarrista Greg Jong, miembro original de la banda que se llegó a Berlín a trabajar en tres de las canciones del disco fue esencial además de trabajar en la composición y producción.

Para la banda este relanzamiento es un renacer. La hoja promocional comenta que este es su disco compuesto con más confianza, llevándolos a una nueva dirección mientras continúan teniendo los elementos que atrajeron a sus primeros fans.  Si bien es cierto que piezas como “Ghosts & Typhoons” y la canción título llegan a alcanzar una altura soberbia en cuando a calidad, hay piezas que sin llegar a ser menores, solo aportan un hálito de belleza. Y hay quien pensará que eso es más que suficiente, pues entonces aquí está el disco dispuesto a ser escuchado.