XIII Bis Records © 2011

Tracklisting:
01. Under Siege
02. Braving The Seas
03. Merciless Times
04. Tales of the Sands
05. Sour Sigh
06. Dawn Within
07. Wide Shut
08. Requiem for a Goodbye
09. Beyond the Stars
10. Time to Grow

Realmente me encanta descubrir música, y mucho más cuando esta viene de países que apenas conozco (por supuesto no “físicamente”hablando, pues en realidad solo he vivido en dos); y por supuesto es mucho más placentero el descubrimiento cuando la música está bien hecha, y aún más cuando me llama la atención. Y eso me ha pasado al escuchar a Myrath (cuyo significado, traducido al español es Legado), una banda proveniente de Tunez y previamente desconocida para mí, que con su álbum de este año 2011 titulado “Tales Of The Sands” nos entregan su tercer esfuerzo discográfico, compuesto de 10 cortes y con un total de 45 minutos de duración.

Después de investigar un poco he descubierto que Myrath es bien conocida dentro de la comunidad de metal progresivo a nivel mundial, principalmente por el hecho de ser una banda talentosa con un sonido que mezcla un marcado estilo oriental con los fundamentos del metal progresivo, dando como resultado un producto original, y muy bien desempeñado en el aspecto musical por los componentes de la banda. Esta mezcla de metal con sonidos e instrumentos arábigos ha sido explotada anteriormente por bandas como Orpahend Land, si bien es cierto que Myrath se las ha arreglado para ofrecer su propio sabor del Oriente Medio con un toque que en este tercer álbum ya pudiéramos llamar como distintivo. Es justo consignar sin embargo, que con este nuevo álbum la banda no se despega demasiado de lo ofrecido en su LP anterior “Desert Call”, si bien el nuevo CD clasifica como más variado, con un nivel de composición más directo y con un rango vocal más sostenido, al mismo tiempo que los temas son más cortos y contundentes, bajando un poco la complejidad progresiva de la oferta anterior en aras de un sonido más heavy y con estribillos que “enganchan”.Variar no es necesariamente progresar, pero en el caso de Myrath le añade una pizca de interesante sabor a su obra, mucho más dentro de un género donde innovar es tan difícil en estos días. Y para redondear el producto, el álbum cuenta con una producción de lujo y una mezcla excelente a cargo de Fredrik Nordstrom, ha sido masterizado por Jens Bogren, dando como resultado un sonido de primera, que hará las delicias de los fans de Kamelot y Symphony X.

El álbum comienza con “Under Siege”, y desde los primeros segundos pueden notarse dos cosas. La primera es el gran parecido de la voz de Zaher Zorgatti con la de Roy Kahn de Kamelot, y el segundo el toque de sonidos arábigos del que hablé anteriormente, que le añade un peculiar toque a las guitarras que dominan el tema, acompañadas de unas voces femeninas que aparecen después de la entrada súbita de los teclados. Los primeros 2 minutos del tema ya nos dicen de qué viene este disco, y qué esperar.

“Braving The Seas” continúa por el mismo camino, incorporando las mismas sonoridades folklóricas con ese estilo que la banda ofrece, siempre acompañado de una sección rítmica impecable, que si bien no pretende exagerar en episodios instrumentales de largo ejercicio, sí deja perfectamente claro que los músicos son bien capaces de tocar lo que nos están ofreciendo y más. El tema es dominado por un riff adictivo que persiste a todo lo largo de sus 4 minutos de duración.

“Merciless Times” es a una pista más corta, siendo el primer single del disco y habiendo sido publicada en vídeo, probablemente el primer clip que ya banda haya hecho. Arranca con una percusión oriental para mezclarse con un riff a lo Symphony X que inmediatamente da paso a las voces que parecen sacadas de una mezquita de la mismísima Jerusalén. El coro es excelente, e inmediatamente engancha, el riff se detiene para dar paso a los teclados orientales y a la percusión y de nuevo arranca con las mismas energías, abriendo el camino a un cortísimo solo que te deja con las ganas de más. El tono definitivamente arábico del tema le da el sabor medio oriental justo que saboreas cuando de repente se termina la canción.

La pista siguiente “Tales Of The Sands”, que le da título al álbum, es una de las mejores del disco. Es una canción muy buena, con un melódico y acústico comienzo en los primeros segundos que se torna más heavy con unas guitarras absolutamente geniales, adornadas por instrumentos de percusión que enriquecen el sonido y parte de las letras son cantadas en una lengua oriental que no es precisamente el inglés. Alrededor de los 3 minutos hay un excelente riff de guitarra, acompañado por una batería poderosa, que flotan por encima de un sonido de teclado árabe. El tema se te desliza entre las manos finalizando con otras guitarras acústicas perfectamente colocadas.

“Sour Sigh” entrega nuevamente un comienzo suave que solo dura por unos segundos para abrir la puerta a una explosión de sonidos y estructuras rítmicas. El sabor Kamelot se acentúa un poco más en este tema, con juegos vocales bien diseñados y un momento instrumental corto, pero bien colocado, que incluye un poderoso y exquisito riff de guitarra, demasiado breve para mi gusto, pero que adiciona energía al tema.

“Dawn Within” es la canción más corta del CD, pero está originalmente concebida, haciendo que te importe un poquitín menos su brevedad. La batería en este tema es peculiarmente buena, ofreciendo dramáticos cambios que marcan un tono diferente con respecto a los cortes anteriores. Y te tropiezas de narices con otro solo veloz y nuevamente corto (creo que lo he dicho antes), con un particular sabor a Michael Romeo. El estribillo es pegajoso y encaja muy bien sobre todo al final del tema.

A continuación sigue “Wide Shut”, un corte poderoso con un uso destacado de los teclados, intercalando además las partes vocales con las instrumentales. Es un tema donde el sabor oriental está mucho menos más marcado, a pesar de estar presente, y donde la banda suena poco mucho más progresiva, nuevamente con algunas reminiscencias de Kamelot, pero sin que estén para nada plagiando el sonido de la banda de Thomas Youngblood. El tema es dinámico y cambia como un camaleón y es definitivamente la pista que más se acerca al sonido del anterior álbum “Desert Call”, finalizando a toda velocidad con un redoble de batería atronador.

“Requiem For A Goodbye” comienza con unos teclados caóticos y bombásticos, seguidos por una mezcla de guitarras bajo y batería, que se aúnan con las voces y crecen creando una estructura musical. El tema incluye además una pareja de solos, uno de guitarra y otro de teclados que se alternan cabalgando sobre unas guitarras crujientes, y alrededor del minuto 2:55 súbitamente desciende y se torna más tierno y suave con un piano que acolcha las voces, para retornar después de manera súbita a un sonido poderoso con ciertos tintes de Dream Theater que inmediatamente asumen el sabor oriental que funciona como sello de la banda. En este punto me percato que sigo echando de menos los extensos solos de guitarra que se podían encontrar en el álbum anterior “Desert Call”, el cual era evidentemente mucho más orientado a un sonido progresivo.

La próxima pista titulada “Beyond The Stars” tiene un excelente desempeño vocal con el inherente tono árabe, pero de una manera más acentuada y que lo adorna muy bien, siendo sugerente. A esta altura es más que claro que la mezcla de sazones medio orientales en la composición de los temas le da a Myrath su sabor distintivo. De repente, a mediados del tema aparece un interludio musical instrumental de unos dos minutos de duración, donde se mezclan teclados, solos de guitarra y una excelente percusión que se desdoblan para culminar en las voces de Zorgatti. Demasiado corto, me deja con la boca abierta deseando 3 minutos más.

El CD cierra con “Time To Grow”, que es un tema más en la vena del power metal tradicional, sin por ello sonar repetitivo ni aburrido en lo más mínimo, con un excelente estribillo y unos teclados en el fondo que le añaden el acompañamiento perfecto a la sección rítmica que cierra el tema por todo lo alto.

“Tales Of The Sands” es un muy buen álbum de metal progresivo, que a pesar de no ser tan progresivo incluye los suficientes elementos como para ser considerado dentro de ese género. La banda tiene su sello original y debería ser mejor reconocida a nivel internacional, y espero que sepan mantenerse originales y que no usen sus elementos folklóricos como único gancho de mercado. Este disco quizás no presupone un cambio radical con respecto al anterior, sin embargo el concepto es diferente. A pesar de que a esta altura de mi vida soy más que escéptico cuando se trata de catalogar un disco dentro de la escena del metal, me siento satisfecho con esta entrega de Myrath, y después de varias escuchas no puedo menos que recomendarlo. Si te gusta el género, lo adorarás, y si no aun así reconocerás que suena diferente y te arrancará una sonrisa.

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