Nightmare Sony © 2013

Tracklist:
01   1900
02   City of Hope
03   Just Remains
04   The Killing Fields
05   Baptized in Flames
06   Paying Death’s Toll
07   Czardas
08   Last Days in Paradise
09   Needham Point
10   That Defining Moment
11   Hell’s Gate
12   Wasting Time

Six Minute Century es una banda de power rock de Houston. Esta definición puede traer confusión porque el power rock y power metal americano son algo diferentes del power metal europeo, caracterizada más por un ritmo constante de doble bombo. En el caso de SMC, hay bastante de prog power metal en este disco.

La banda es de Houston, Texas, donde se formaron en el 2004. La mente creativa detrás de la banda es el guitarrista  Don LaFon (Krucible,  Mystic Cross, Logan),  sonando en la vena de bandas como Savatage, Dio y Kamelot, con el estilo vocal de Fates Warning ("Needham Point" nos lo recuerda mucho"),  Dream Theater y TNT.

 Sin embargo, hay en canciones como “Just Remains” cierto recuerdo a Kansas, quizás por los timbres de teclado.

Las letras han corrido a cargo de Chuck Williams, que recrea hechos históricos que son arropados por las orquestaciones musicales Don LaFon, quien por una parte declara que la banda no se ha hecho para demostrar cuan buenos pueden ser los músicos, sino dándole más peso a las composiciones, y al mismo tiempo se baja cada solo de guitarra que quita el hipo, como el de “Just Remains”. Al mismo tiempo, Dr. Froth se apunta unas lineas de bajo en “Czardas”, que te dejan con la boca abierta,

Hay algo de Kamelot en “The Killing Fields”, con complejas estructuras de guitarra donde la sección rítmica se las ve difíciles por ser una composición complicada en cuanto a ritmos. Junto a Michael "Dr. Froth" Millsap está Mikey Lewis a la bateria.

Dr Froth se vuelve a destacar en “Baptized in Flames”, la canción más larga del disco, que recuerda a Savatage, y en los primeros segundos de “Paying Death’s Toll” donde se lanza violentamente sobre el mástil al punto de causar preocupación,  y varias veces más durante todo el disco.

La banda demuestra estar muy bien entrenada, donde todos los músicos manifiestan su virtuosismo más bien discretamente, sin alardes, pero escuchando las composiciones con atención, podemos sentir que no son fáciles de tocar.

Siendo un Cd que distribuye Nightmare Records, esta de más decir que la calidad de la banda está garantizada. Sin embargo en este disco no siento la producción tan cuidada como en otras obras de la misma discográfica. No quiere decir que el disco suene mal, pero algo más de fuerza estaría mucho mejor. Aun así, todos los instrumentos se pueden escuchar con claridad a veces asombrosa, caso del bajo, que en ningún momento se confunde con el bombo de la batería.

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