Me causa intensa alegría cada vez que veo a una banda de Hispanoamérica llegar a Europa y demostrar que si se puede. Es un camino de esfuerzo y sacrificio, pero están aquí y ahora nos llega Jet Jaguar, banda formada en el 2014 en Cancun. Con solo un EP en 2016 hicieron una primera gira europea que pasó por Alemania, Bélgica, Holanda, Polonia, Hungría y Rumanía. Han recibido un reconocimiento mundial por ser la primera banda hispanoamericana en ganar el Wacken Open Air Metal Battle en Alemania en el 2017.

Ya con estos logros, que no han salido de la nada, más la salida de su disco debut con Pride and Joy Music la banda tiene un puesto que debe seguir defendiendo. La música es algo retro. Es un Hard Rock fuertemente influenciado por los años ochenta. Estoy seguro que grupos como Skid Rock en su disco debut, Bon Jovi y los mejores exponentes del glam americano son la proteína que ha hecho crecer a Jet Jaguar.

La banda no le hace ascos a cantar en español, y ahí están “Tormenta” y “Nunca Más”, aunque su primera cancion en español fue “Rompiendo el Acero” que salió en su primer EP y me alegra que no repitan aquí, no por el idioma sino por el hecho de que se trata de una grabación de hace tres años y es mejor presentar canciones frescas. El resto está cantado en inglés.

Entre las piezas destacadas está “Up to the Top” con un riff que muy bien pudo haber nacido en Los Angeles al igual que “Mr. Lee” y tantas otras. En otras canciones el grupo trabaja una coralidad que quizás en los directos sea efectiva como ocurre en las pistas “Blinding Lights” con mucha fuerza y también en “Race or Die”. Los riffs de guitarra están hechos para darte alegría y al mismo tiempo hacerte recordar, algo que ocurrirá en más de un momento. Cuando comienzan las canciones hay momentos que esperas que entre la voz de Ozzy Osbourne, Don Dokken o Jeff Keith de Tesla.

Ya que hablamos de vocalistas, la voz de Maxx Mendoza se ajusta como guante de metacrilato a la mano. Lo mismo maneja el susurro en “No Surrender” que se lanza a los agudos imposibles de “Final Prayers”.  Terminan con “10 000 Voices” que es la pieza más alejada del resto del disco con un intermedio semi orquestal que contrasta fuertemente con el inicio y final.

Felicidades Jet Jaguar. Debéis estar orgullosos de lo logrado y al mismo tiempo prestos a seguir hacia adelante.