Tracklisting:
01 Red Hands Black Deeds (Prelude)
02 Broken Ones
03 The Come Up
04 A Longer View
05 Soul Crusher
06 Off The Tracks
07 Long Way Home
08 Bring Me Back
09 The Devil In Our Wake
10 Blood Trophies
11 So Long
12 Tusk And Bone
13 Scavengers
El 28 de julio sale a la luz 'Red Hands Black Deeds' el sexto álbum de los rockeros de Jefferson, Missouri, el arenoso combo ha grabado su disco más maduro y orgánico hasta la fecha.
Llevan desde 1996, han compartido el escenario y girado con grandes artistas como: AC/DC, Alice In Chains, Godsmack, Breaking Benjamin, Seether, Nickelback, Three Doors Down, In This Moment, Cheap Trick, Theory of a Deadman, Hinder entre otros, y han tocado en festivales importantes como Rocklahoma, Rock Fest, KRockathon, Rock Carnival 2016, High Elevation Rock Festival y Midwest Rock Fest.
Shaman's Harvest cosechó un gran éxito con su anterior "Smokin 'Hearts & Broken Guns" en 2014, álbum que ha cosechado más de 31 millones de reproducciones. El álbum alcanzó el puesto # 11 en los EE.UU, después de una carrera de 22 semanas en la radio Active Rock. También pasó más de cuatro meses en el Top 10 de iTunes Metal Songs Chart. El vídeo de la canción "In Chains", tiene más de 3 millones de reproducciones en YouTube, mientras que la banda tiene un total de 8 millones de reproducciones del resto de sus canciones.
La clave de la longevidad de la banda es triple: estar radicados en Missouri, que le da a la banda una autenticidad propia del lugar. "Nuestra música no sería lo que es si no fuéramos de un estado de hillbilly", señala Fisher. Segundo, conocer el don de la distancia y estar abierto al cambio.
Amplificadores vintage, papel de lija, CNN, y Motown podría no sonar como conceptos sueltos, sin una conexión entre unos y otros. Pero esta mezcla aparentemente extraña, en realidad comprende todo lo que encontrareis en este nuevo LP que sale bajo el sello holandés Mascot Records. Una grabación a la que le han dado un enfoque analógico de la mano del productor Keith Armstrong. Os aviso que este disco está cubierto de un halo de oscuridad conceptual con testimonios casi ceremoniales.
"Las pezuñas de las patas de las cabras son los nuevos cencerros", dice el guitarrista rítmico Josh Hamler sobre el instrumento de percusión rural hecho literalmente una cuerda y las patas de este animal. "Estaba en casa de nuestro productor Keith Armstrong, le dijimos a Keith que queríamos un cierto sonido, y empezó a sacar cosas que que nunca pensábamos que tendría, como las pezuñas de las cabras, papel de lija o un viejo teléfono rotatorio".
Líricamente, la banda se ha metido en un nuevo territorio, solidarizándose con las actuales luchas políticas, sociales y económicas que Estados Unidos enfrenta como nación. El resultado es un sonido más oscuro, visceral y sin embargo cálido. En muchas formas, diferente al disco del año 2014, "Smokin 'Hearts & Broken Guns".
El tema inicial es un preludio bastante inquietante que suena a ceremonial, con tambores tribales, pero que da paso a
un poderoso riff de "Broken Ones" el primer single del disco, un tema con gancho, marca de la casa, "The Come Up", es una canción optimista que yuxtapone un backbeat de estilo Motown con el Rock and Roll clásico de unos Rolling Stones y que se adentra de lleno en una atractiva depresión. "Hay tanta negatividad en las redes sociales hoy en día... y un montón de gente luchando por los problemas reales, esos que nos perjudican como nación", dice el cantante Nathan Hunt.
Pero, "The Come Up" es también un reconocimiento a la propia batalla del cantante contra la depresión. "Es terapéutico para mí", dice. "Es sólo que a veces cuando no se puede cambiar la mierda, tienes que darte cuenta de que no se puede moldear todo en tu vida y que hay que aprender a encajar los golpes", dice Hunt, que superó un cáncer de garganta en 2014 que podría haber dado al traste con la banda. Sin duda un temazo.
El piano que abre "A Longer View" anuncia que adoptan un tono bastante más serio y sombrío. Con elegantes líneas vocales, cálidas y emotivas. En "Soul Crusher" evocan voces soul negras, con un cierto trasfondo blues rockero, es otro tema con gancho. El bluesy “Off The Tracks”, te atrapara como fantasma del pantano, reconozco que es otra pieza muy lograda. “Long Way Home” es otro corte al que le infunden un tono blues de ritmo medio con acento rockero. "The Devil In Our Wake" se abre con un primer minuto atmosférico para luego enchufar un riff de rock sureño sucio cargado de fuzz, donde la sección rítmica tiene un protagonismo evidente, sobre todo el recién reclutado batería Adam Zemanek, proporcionando un crujiente ritmo. No se queda detrás el bajo de Matt Fisher, que también goza de un cierto protagonismo en la pista que sigue, "Blood Trophies". En "So Long" usan un grueso riff y un montón de Groove, como vía de expiación de una amplia gama de elementos que van desde el blues al rock sureño. La casi acústica "Tusk and Bone" se cuece a fuego lento y cuenta con un gran solo de guitarra del también nuevo miembro Derrick Shipp. El final llega con la visceral "Scavenger" con voz de apertura muy distorsionada sobre las guitarras desnudas y una línea de bajo monótona que marca la canción con voz amortiguada, hasta que se va desvaneciendo. Pero luego reaparece como un tema sorpresa, country rock, comiquete, "Hookers and Blow". Un clímax final un tanto inesperado, pero visto lo visto en este disco, mejor no esperar nada y dejarte sorprender.
Tengo que decir que no me esperaba un disco como este a estas alturas de la carrera de Shaman's Harvest, es su LP menos mainsteam hasta la fecha, donde muestran una gama mucho más amplia de madurez y sofisticación en la música, consiguiendo un resultado admirable y variado. Aunque creo que no entra a la primera.
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