La gira del treinta aniversario de los sevillanos Reincidentes llegaba a Madrid el pasado 1 de marzo para arrancar el mes de forma entretenida. El lugar elegido fue la sala Penélope, que no se llegó a llenar pero que tuvo una buena entrada, casi consiguiendo su aforo total. Para esta plaza se gestó un concurso de versiones sobre la banda principal. El ganador tendría la oportunidad de abrir para ellos y así fue como los conquenses Trance, fueron los vencedores y demostraron estar a la altura de la circunstancia, no solo por la versión, sino también por convencer y defender lo suyo frente a un público que sabe bien lo que quiere. Por lo tanto de esta manera lo vivimos a acompañados por una señorita, ¡¡¡que pinta muy bien!!! Ja, ja, ja, tras el partido mañanero de fútbol a los Reinci me fui a ver.

TRANCE

Con tan solo dos discos grandes en su haber, se van haciendo un hueco dentro del ambiente próximo al movimiento del Rock Urbano, aunque su música gracias a esas teclas de gran lujo, te trasporta a otros ambientes para unos músicos, que no dejan de sorprender. Con la presentación de su segundo disco, van ganando terreno y esta noche es una cita importante para demostrar lo que valen y callar alguna boca que otra.

Una docena de cortes descargaron pasadas las ocho y poco de la tarde comenzando con “Linda princesa”, que arranca con fuerza la descarga de este quinteto de jóvenes. Entra la guitarra del zurdo Iñaki y el cantante y también guitarrista Víctor que abren con bloque de tres temas cerrando con la energía de “Actívate” y que vienen a presentarse antes un público que poco a poco iba llenando el recinto, mientras que a los que ya les conocían, agradaban y convencían a sus nuevos seguidores desde esta gran puesta de largo para ellos.

Otro plato fuerte para la banda es la segunda voz de la cual se encarga Juanjo que junto los teclados, deja claro que esta banda es grande por varias razones: buenos coros, mucha energía y dos voces que se combinan perfectamente, eso sí para el tiempo que tenían Víctor fue el encargado de ejecutar casi todas las piezas. Por otro lado y menos importante el pequeño de José que hace gala de su bonito bajo rojo que no deja de moverse por el escenario, como pez en el agua, mientras que el señor Rubén golpea los parches y ejecuta extraordinariamente desde la batería. Continuamos con sus historias y su “Cuentos” para llegar a otra gran pieza de la noche como fue “Más viejo que ayer”, encantados de ver toda la magia que tienen dentro con esos sonidos púrpuras en homenaje al desapareció Jon Lord lo cual les hace grandes y dice mucho de su saber musical, para esta banda que esperemos nos sorprenda en este año entrante 2014.

Hubo también un momento de emoción mientras que se le dedica una canción a un compañero, que recientemente se ha perdido, ya que el lado humano y personal se lo ganan a golpes de cerveza y de detalles como este, las cicatrices se curan y continuamos con nuestra marcha, en la que disfrutamos de la versión que estos tipos se marcaron de unos de sus grupos favoritos de rock, como son los del sur que en unos minutos descargaran con un público bastante caliente, al cual le ofrecen esa obra llamada “Quisiera despertar” con toque de trompeta. Mientras, nosotros hacíamos de las nuestras entre el público y el foso de fotos, que más que un foso era un paseíllo de la muerte, por el que casi luego más tarde volcamos, ja, ja, ja. Pero esto continúa y va llegando a su fin algún tema, que nos encontramos, como “Soledad” que para nada estaba presente en esta noche multitudinaria, con la alegría de ver a Víctor con su armónica y despedirse con el single que arrancó esta nueva aventura, “Parar es morir” que es el título de su última obra y que concluye con el poder de la ovación sobre las nueve de la noche, conquistando Penélope y calentando el ambiente, por si no lo estuviera lo suficiente.

REINCIDENTES

Todo listo para que de nuevo estos ya conocidos por todos, presenten ante su gente una buena recopilación de su historia con dos discos y un DVD que se van a dar vida a eso de las nueve y veinte de la noche, como ya nos dijo Fernando en nuestro programa: “no iba a faltar de nada” y así fue, cumplió lo prometido, al igual que lo están realizando en toda esta gira.

El personal con muchas ganas y acogiendo una vez más a sus colegas los Reincidentes en una capital que responde a su nueva llamada. Comenzaron con “Vamos pal infierno”, desde ese momento esto no para y como ya es costumbre unos cuantos temas a toda intensidad en los cuales nos demuestran que están más vivos que nunca y que nos queda banda para muchos años. De una manera magistral, Fernando Madina, continúa aporreando el bajo, siendo lo más novedoso el verle como se defiende con las distintas lenguas de las cuales se puebla este “Aniversario” (algo que ya ha hecho en otras ocasiones, pero con tantas canciones del tirón) que nos hace verle en otras texturas en la cuales cumple al 100%. Eso sí, siempre acompañado por los suyos, muchos años ya de carretera de autocarabana que se encuentra en la misma puerta de la sala, para finalmente recogerlo todo para continuar su circo andante del Rock and Roll, un ampli algo más escacharrado que se me deslizó por las manos…

Aquello está de bote en bote, por lo tanto me aparté durante alguna parte del concierto al puesto de merchan, en el cual estaban los colegas de los Trance vendiendo material de ambas bandas y pude intercambian impresiones con ellos. Evidentemente todas satisfactorias, como no podía ser menos.

El ambiente más que grato y sonando potentes composiciones como puede ser esta: “Rosas en el mar” y las guitarras de Barea junto a la de Finito. Vibrando conjuntamente, se nos pasa el tiempo volado por lo cual eso demuestra lo bien que lo estamos pasando, una cervezas para aliviar la sed también fueron gratificantes, en determinados momentos del show.

Consumida la primera parte del acto, para llegar a los grandes clásicos que ya forman parte de nuestra banda sonora ya que estos treinta años han dado para mucho, por ello suena “La infancia en un cargador” que da paso a viejos gritos de guerra, que por desgracia se mantienen vivos, con la visión siempre comprometida de los de Sevilla, que siguen dirigidos por Carlos y Nacho en la sombra, cada uno en su lugar y el personal de Atracción con el que trabajan codo con codo, hasta la actualidad.

La historia sigue, tras los parches el señor Manuel que firme en su lugar mantiene la calma y ajusta el redoble de sus tambores, con un sonido que no dio ningún problema aparente y todo salió a pedir de boca, viniéndonos arriba con coplas como “La republicana”, soñada por muchos, pero olvidada por otros… Tratando los problemas de la sociedad que nos atañen a todos “Ay! Dolores”, ninguno nos mantenemos al margen de estos problemas, pero menos mal que nos quedan otras partes de la vida que nos mantienen contentos ya que no nos privamos del  “Vicio”, cada uno del suyo, claro está, ja, ja, ja Vamos con un set list, junto a unas sensaciones del paso por la vida que nos agradan y que convierten a esta banda en una apisonadora de saber estar, con los pies firmes en los escenarios, haciendo una fiesta de cada concierto, con el personal contento de lo que está disfrutando, creyéndose el mensaje.

Cayeron muchos cortes, un total de treinta y cinco que fuimos degustando uno a uno, todo genial, para los tiempos que corren en un primer sábado de marzo que no podía empezar de mejor forma. “Aprendiendo a luchar” sin olvidar los orígenes de todos “Andalucía entera”. Para unos ya no tan jóvenes luchadores y concienciados con su alrededor que se acercan al momento del bis, que llega sobre las once de la noche, con el griterío oportuno del personal, para terminar de manera pletórica, con una gente que les quiere y ellos que se dejan ver y querer, estando con su vasca, con su pueblo, con los de siempre, compartiendo y viviendo esta aventura.

Llegan en formato de “Huracán” arrasando todo lo que se les pone a su alcance, para dejar claro que están donde se merecen, porque se lo han ganada a pulso. Momentos en los cuales me fui al foso de fotos, para pillar alguna fotito más y casi me mato con las cajas de coca-cola que estaban por el medio (será por lo revuelta que está la marcha en esto momentos), pero salí ileso y disfruté del final por dicho lugar, para ver que se hermanaban las dos bandas de la noche y nos dejaban un buen sabor de boca para terminar a las once y media, con buen rollo, junto a la profesionalidad a la cual nos tienen acostumbrados, con ese “Jartos de aguantar” para seguir esperando… el cambio…

La autocarabana no va a dejar de rodar por las carreteras del país, por lo tanto si tienes la oportunidad de ir a verles ni te lo pienses, no te fraudan, están los Reinci en unos de sus mejores momentos. ¡¡¡¡Mucha suerte y nos vemos en los festivales!!!!

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