Fotos: Mari Jose Martin (www.lamiradanegra.es)
Tras las tormentas y la nieve aparecieron los Vikingos en Euskal Herria, no podían escoger una mejor fecha para desembarcar por cuarta vez en estas tierras. Su drakkar surco la ria de Bilbao, venían con la intención de arrasar esta ciudad y así fue. Esta vez con un par de aliados, los Heavys californianos HUNTRESS y los Heavy - Thrashers británicos SAVAGE MESSIAH, unos secuaces que también explotaron unas cuantas cabezas.
Otra fría y lluviosa noche en Bilbao, pero allí estábamos unos cuantos "guerreros" plantando cara al temporal y dispuestos a ver una vez más las evoluciones de una de las bandas más populares ahora mismo a nivel mundial. Las puertas se abrieron a la hora acordada, una larga fila serpenteaba el frontal de la sala, tras recoger la acreditación y dejar una taquilla, la "carga" (chaquetas, gorro, bufanda), me dispuse a echar un vistazo a los bien surtidos puestos de merchan que presidían como siempre la entrada de la sala. Tome posición en una tercera fila más o menos, para no perderme detalle del show de los SAVAGE MESSIAH, otros "viejos" conocidos por estas tierras, esta era su tercera vez en Vizcaya, estuvieron con Overkill en Durango hace ya unos cuantos años, cuando aquello eran muy jóvenes, luego regresaron junto a los Ángelus Apátrida y Havok, hecho que recordaría el vocalista Dave Silver en una de sus charlas entre canción y canción.
El concierto comenzó con puntualidad inglesa, a las 19:30 SAVAGE MESSIAH abrieron su corto set con la potente y extensa "Iconocaust", de su más reciente álbum "The Fateful Dark", en se momento la audiencia era importante y enseguida se engancho con el thrash-heavy de estos chicos. Tras el saludo de rigor tocaron otra de las nuevas "Cross of Babylon", un enérgico corte, que hizo mover a las primeras filas.
Aprovechando al máximo el tiempo del que disponían, soltaron la heavy "Hellblazer", otra de las buenas canciones de su nuevo disco, "The Fateful Dark", como todas las que sonaron esa noche. Una que esperaba con ansias era "Scavengers of Mercy", par ami gusto el mejor tema de este disco, muy thrashera, verlos tocarla en directo fue una pasada, para mi el mejor momento de su corto set. Ah muy buena pegada la del baterista Andrea Gorio.
Se les vio muy motivados y entregados durante todo el concierto, disfrutando y haciéndonos disfrutar. Sonaba la canción que da titulo al nuevo disco "The Fateful Dark", con el potente bajo de Mira Sláma, un tema de 6 minutos y medio, que aunque es más melódico, hizo disfrutar a la gente con esas partes thrash que hicieron movieron unas cuantas cabezas. Muy bueno el solo del guitarrista Joff Bailey, que como sus compañeros no paro de moverse y poner poses heavys. Esta claro que han mejorado mucho, sus nuevas canciones suenan mucho más maduras y ricas en matices.
Para cerrar escogieron otra bien heavy, "Minority of One", es una pena que el show fuera tan corto, lo hicieron perfecto, el sonido fue bueno, creo que alguno se quedo con ganas de más, incluidos ellos mismos. Se despiden y quedamos a la espera de ver a los HUNTRESS venidos de California.
Había cierta expectación por ver que ofrecían estos HUNTRESS en directo, confieso que apenas les conocía, solo había visto algunos videoclips y escuchado unas pocas canciones de ellos en Youtube. Tienen un par de disco publicados, el más reciente en 2013, están por lanzar un nuevo álbum. Pues allí que me dispuse a disfrutar de su presentación con interés.
Estos también arrancaron a su hora (20:15), primero salio la banda y luego la vocalista Jill Janus, toda una diva como demostraría pasado unos minutos. Abrieron su show con "Senicide", una canción que no esta mal, escuchándola ahora en casa con tranquilidad, pero que en directo me pareció muy fría, al menos en su arranque, supongo que un poco de nervios en los primeros minutos, pero esa sensación se despejo a mitad de canción la estilizada Jill Janus tomo el mando y dieron un gran concierto.
Esta chica es una bestia en el escenario, no paro ni un instante, de moverse, de animar y de poner poses demoníacas, jejeje. Es una estupenda maestra de ceremonias, tiene un buen registro vocal, tan buena es su voz más heavy clásica, como sus rugidos endemoniados. La segunda canción fue "Destroy Your Life", puro heavy, donde Jill mostró todo su esplendor vocal y en cuanto a presencia escénica, con un halo teatral, musicalmente en ciertos momentos me recuerdan a los primeros Mercyful Fate, aunque lo de HUNTRESS es otra cosa.
Los de Highland Park, California, siguieron con “Harsh Times On Planet Stoked”, que si mal no recuerdo fue una de las que presento el guitarrista Blake Meahl, en un farragoso mexicano, en un principio solicitado por Jill para entenderse con los presentes, pero visto el resultado creo que mejor sería seguir haciéndolo en Ingles, las risas hicieron que el guitarra se atreviera a soltar un par de frases más, en otro momento del concierto, pero que fueron igual de inaccesibles y cómicas.
Gran momento cuando sonó "Zenith" tal vez una de las canciones más conocidas de la banda, gracias al brillante vídeo que sacaron los de Napalm Records, Jill arrolladora, aunque en alguna canción tuvo algún ligero desafine, pero nada grave. Otra bien conocida y no menos impresionante es "Spell Eater", con ese arranque casi Black metal, Jill se lucio, fue el momento más emotivo del show. No me podrán negar que el coro tiene mucho de Mercyful Fate. Impresionante la labor del batería Carl Wierzbicky.
Jill explicó que cuando estuvo de copas con Lemmy de Motörhead le pidió que le escribiera la letra para una canción. El resultado fue “I Want To Fuck You To Death”. La cantante dijo ¡Qué romántico!, y comenzaron a tocar esta pieza. El coro que incluye me recuerda a algo, pero no se a que, muy buenos los solos de los guitarras Blake Meahl y Eli Santana, por cierto este ultimo es o fue guitarra de Holy Grail, no se si es fijo en HUNTRESS, pero ahí estaba el tío con su hacha, repartiendo riffs y solos a diestra y siniestra.
En uno de los parlamento de Jill, comento que era consumidora de cannabis, animó a la audiencia a fumarse las estrellas y todo el firmamento, para acto seguido dar paso a “Starbound Beast”, demostrando su nivel, con canciones complejas pero a la vez enérgicas. Me encanto el solo de guitarra de esta canción. Heavy muy potente sonó "Flesh”, un corte poco convencional, pero muy currado, con alguna galopada a lo power, destacando el bajista Ian Alden y el batería Carl Wierzbicky. Con trepidantes solos de guitarras. Jill no paro de buscar complicidad con las primeras filas, se entrego y la gente lo agradeció, no se exactamente de cuanto seria la asistencia esa noche pero calculo que 700 personas si que habrían. Para cerrar usaron “Eight Of Swords”, de su primer disco y que conocía del videoclip, final perfecto para una notable actuación. Seguro que unos cuantos al día siguiente se pusieron a buscar sus discos.
Llegaba el momento cumbre de la noche, por los altavoces comenzó a sonar el "Run To The Hills" de los Maiden y en el escenario parpadeaban las luces azuladas que dejaban ver el telón de fondo con la portada de su ultimo disco “Deceiver Of The Gods” que venían presentando, su noveno álbum en 15 años de carrera, una trayectoria ascendente, que una vez más podíamos disfrutar por estas tierras. Salen a escena y la sala estalla al unísono.
El primer hachazo fue "Father of the Wolf", seguida de la que da titulo al álbum “Deceiver Of The Gods”, un temazo que se ha convertido en una de las grandes canciones de esta banda, la gente lo coreo efusivamente, imposible quedarse quieto ante algo tan grande. El gigante Johan Hegg estuvo impresionante toda la noche, me hace mucha gracia verlo entre canción y canción con esa sonrisa picara y un aspecto de ser el gigante bonachón de la horda, pero que cuando entran en combate se transforma en una bestia imparable. No paro de animar y agradecer al público con unos graves Eskerrik Asko (Muchas Gracias), de más esta decir que con esto termino de echarse al "respetable" en el bolsillo. Johan se comunico tanto con frases en castellano como en ingles, no paro de agradecer a los presentes el estar esa fría noche con ellos.
La entrega de la banda fue absoluta, aunque esta claro que la mayor cuota protagonismo sobre escena se la lleva el gigante Hegg. Otro mandoble importante recibimos con “Live For The Kill”, otro clásico que la gente coreo y gozo. Si antes sonó un clásico acto seguido un clásicazo en toda regla “Free Will Sacrifice”, con el que se formo un circle pit muy intenso, pero que no duro demasiado. Sin apenas descanso caía todo un himno viking death: “Asator”, vaya ritmo que llevamos y vaya setlist insuperable el de esa noche. El sonido fue macizo, todo sonaba perfecto. Otra no menos ovacionada fue “For Victory Or Death”, la sala casi al completo tarareando la melodía, al terminar Johan aprovecho para refrescar el gaznate, bebiendo el contenido integro de su cuerno, que parecía vino, soltando un “Osasuna” (salud) que los fans vitorearon.
Vuelto al material nuevo con “As Loke Falls” y Hegg rugiendo como una bestia parda, bueno más que parda, rubia. “Bleed For Ancient Gods”, otro temazo en el que la banda al completo hizo sus acostumbrados headbanging, el guitarra Olavi Mikkonen como lugarteniente de Hegg, machacándonos con sus riffs y sus solos de guitarra, secundado por el otro hacha Johan Söderberg. Ahí estábamos dándolo todo con el estribillo "Sacrifice, Sacrifice...”
El estruendoso rugir de la sección rítmica conformada por el bajista Ted Lundström y el batería Fredrik Andersson, anunciaba otro trallazo épico "Death In Fire", que grandes. Sacaron un poco el pie del acelerador con la extensa y doomy “The Last Stand Of Frej”, del “Surtur Rising”, pesadez y melodías a partes iguales. Era momento de soltar otro bombazo que removió los cimientos de la sala Santana 27, “Guardians Of Asgaard”, allí se movieron hasta los barman's. Johan bramando y los fans imbuidos en un frenesí, por el repaso metalero que nos estaban dando los AMON AMARTH.
Otra de la nueva hornada “Shape Shifter”, a la que siguió otra algo más antigua “Cry Of The Black Birds” del disco de 2006 “With Oden on Our Side”, estábamos cerca del final pero seguían tocando grandes canciones como “War Of The Gods” o la Melodeath metalera “Victorious March”, con la que se marcharon al backstage, para refrescarse mientras los entregados seguidores les pedían los bises.
No hice falta mucho esfuerzo por que enseguida volvieron y Johan portaba un enorme martillo de Thor de atrezo, sonaban los primeros acordes de la inigualable “Twilight Of The Thunder God” y justo en el momento del trueno descargo el inmenso martillo, para marcar el arranque de esa impresionante pieza. Llegaba el inevitable final, con otro himno donde los halla, “The Pursuit Of Vikings”, allí todo hijo de buen vecino saltando al ritmo que imponían los vikingos, final glorioso para una gran noche de metal.
Para mi ha sido la vez que más los he disfrutado y creo que también la banda ha disfrutado mucho más esta cuarta visita. Son toda una institución del metal Europeo, venerados en todo el mundo, no solo por sus buenas producciones, sino por su arrollador directo. Solo puedo decir "Larga vida a AMON AMARTH".
Luego hubo un After Party donde fueron pinchados clásicos del metal por parte del amigo Koldo. De vuelta a casa y aun hoy sigo con varias de estas canciones metidas en la cabeza y la verdad no me apetece sacármelas. Nos vemos en el próximo concierto.
*Agradecimientos especiales para Mari Jose y Antonio de (www.lamiradanegra.es), por cederme sus fotos para ilustrar esta crónica.