Nadir Music © 2015

Tracklist:
01. Overture in Do Menore
02. The Harmonic Passage
03. The Flame Shall Not Fade
04. Wirewings
05. Son of Winters
06. La Caccia di Turin
07. Golden Worm
08. Victory march
09. La Grotta di Cristallo
10. Crown to the Crowds
11. Panserbjorne
12. The Endless Well
13. Awakening

Muchas veces cuando el propio músico te pide que hagas una reseña de su disco, nos sentimos halagados. Mucho más cuando descubrimos que se trata de un instrumentista de altos vuelos lleno de modestia.  Y es lo que nos ha pasado cuando Dario nos pidió que prestáramos atención al disco debut de Winterage.

The Harmonic Passage es el primer CD de la banda, que ya antes había grabado un Ep y un single. Con los problemas económicos que carga cada nuevo grupo que aun no puede vivir de su música ni siquiera ganar mucho dinero con ella, estos chicos grabaron el disco con una orquesta sinfónica de verdad y un coro. Mucho corazón han puesto en el asador.

El resultado es una impecable grabación que atará a todos los amantes del Symphonic Power Metal.  La overtura es puramente orquestal, dando paso a “The Harmonic Passage”, una canción muy marcada por  los clásicos Rhapsody of Fire, que tiene veloces momentos y pasajes neoclásicos.

Donde comenzamos a quedarnos con la boca abierta del asombro es a partir de “The Flame Shall Not Fade”, que comienza con una línea vocal apegada a la opera, con pasajes  de corte campestre, hasta llegar a los pasajes instrumentales donde descubrimos el talento de nuestro nuevo amigo el tecladista Dario, y también el del guitarrista Riccardo Gisotti que no solo gusta de la velocidad, sino de la hermosa creación de armonías y melodías.

Además de la orquesta, escucharemos un amplio trabajo de violín, dado por el hecho de que fue el violinista Gabriele Boschi quien junto a Dario Gisotti fundara la banda en el 2008.  El tercero en llegar fue Riccardo. Si bien las cuerdas se funden inmersas en las composiciones, el grupo tiene la tendencia de comenzarlas con líneas de violín en vez de riffs de guitarras.

En el 2010 entró la sección rítmica, pero no fue hasta el 2012 que la banda se completara con el vocalista Daniele Barbarossa, quien sigue la tradición de los mejores cantantes italianos, con un espectacular dominio de la voz. La entrada de voz de “Golden Worm” es una muestra de la técnica de este chico.

“Sons of Winter” da un cambio, con el trabajo de la vocalista Silvia Traverso, que por momentos nos recuerda a los Nightwish de Imaginaerum.  Hay en la canción una estructura dramática que la acerca mucho más al clasicismo que al metal, hasta los momentos finales en la que entrada de un doble bombo y una velocidad acelerada cambian por completo la estructura.

“La Caccia di Turin” es un breve fragmento hablado en italiano, cuyos acordes repetirán por un instante en “Victory March”. Y es curioso,  porque a través del Cd  han introducidos pasajes musicales de obras de Dvorak, Mendelssohn, Vivaldi, Guilmant y Tchaikovsky, con el objetivo de que sea el publico quien descubra esos momentos. Como vosotros siempre decimos en esta web, y además es cierto, que la ignorancia nos mata, no logramos descubrirlos, aunque en “Victory March” hay algo…

“La Grotta di Cristallo” está marcada por una melodía tradicional irlandesa con elementos renacentistas, dando paso a la grandiosa “Crown to the Crowds”  con detalles que recuerdan a Sonata Arctica.

“Panserbjorne” por su parte, tiene un aire indudable de Mago de Oz. No creo que los chicos de Winterage hayan escuchado Ilussia, que se gestó  aproximadamente mientras ellos grababan The Harmonic Passage, sin embargo hay momentos durante toda la grabación en que sentimos que está música pudo muy bien estar en aquel disco o viceversa.

Un órgano de iglesia, o setentero, como quieras definirlo, inicia “The Endless Well”,  donde el espectacular trabajo coral nos deja anonadados. De manera épica y grandilocuente cierra “Awakening” en una simbiosis perfecta entre orquesta y banda que nos lleva a aquellos momentos en que disfrutamos de The Quantum Enigma de Epica. Aqui aparece el fragmento de Tchaikovsky y nos alegró descubrirlo, sobretodo para pensar que no somos tan burros.

Grabar este disco tomó más de seis meses, la orquesta es de 40 músicos y todas las composiciones y arreglos para orquesta y coro fueron hechos por el propio grupo. Ellos son los productores del disco, que grabó, mezcló y masterizó Tommy Talamanca en los Nadir Music Studios de Genova, Italia.

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