King Records © 2015

Tracklist:
CD1
01. Rising Force
02. Spellbound
03. Demon Driver
04. Repent
05. Overture
06. From A Thousand Cuts
07. Arpeggios From Hell
08. Crown Of Thorns
09. Badinerie
10. Concerto #4
11. Adagio
12. Far Beyond The Sun
13. Acoustic Paraphrase
14. Dreaming (Tell Me)
15. Gates Of Babylon
16. Into Valhalla
CD2
01. Rise Up
02. Let Sleeping Dogs Lie
03. Red Devil
04. Cadenza #1
05. Trilogy Suite
06. Krakatau
07. Cadenza #2
08. Blue
09. Fugue
10. Cadenza #3 / Finale
11. Heaven Tonight
12. Acoustic Cadenza
13. Black Star
14. I'll See The Light Tonight

Tras editar la colección de material semi olvidado bajo el nombre de Spellbound, Yngwie se embarcó con una extensa gira cuyo resultado es este Spellbound Live.

A pesar de haber treinta canciones, en una discografía que ya casi suma veinte discos de estudio, encontraremos que el guitarrista sigue pensando que Odyssey ha sido su mejor obra hasta la fecha, y ha incluido cuatro canciones, (no podía faltar “Heaven´s Tonight”). También cuatro de Spellbound, el disco presentación, y tres de Relentless. Dos del primer disco y algunas salteadas del resto de su trabajo.

No deja las versiones, y en este disco nos presenta una magistral “The Gates of Babylon” que aunque no supera la original tocada por Ritchie Blackmore y cantada por Ronnie James Dio suena como para quedarse muerto ahí mismo. También se acerca a “Let Sleeping Dogs Lie” de MSG.

Sabido es la inestabilidad en las formaciones que lidera Ingwie. Aquí escuchamos a Nick Marino a la voz, quien se desenvuelve más que decorosamente, sobretodo al tener que lidiar con las canciones que cantaba Jeff Scott Soto cuando quería demostrar lo maravilloso que realmente es en aquel gran disco que es Marching Out.

Si algo nos disgusta un poco es el hecho de que se escuche constantemente al público gritando. Se ha hecho una versión en DVD del concierto Live in Orlando, donde podemos apreciar que Marino, quien también es tecladista, no se pone al frente de la banda casi nunca.  El baterista es Patrick Johansson y el bajista Ralph Ciavolino, están convenientemente en segundo plano, así que todo el protagonismo lo roba Ingwie, quien debe haberse quedado muy contento con el resultado. Nada, que la vida es así y el también es así.

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