Rock CD Records © 2016

Tracklist:
1. Intro
2. God is God
3. Soul Reaver
4. Night Angel
5. When the Demons Awake
6. Dawn of War
7. Interludio
8. Son of Antares
9. Black Flames
10. Shadows in Darkness
11. The Last Lights of a Dying Universe

Este disco lo recibimos por cortesía de la banda. Cuando se pusieron en contacto con nosotros no los conocíamos, pero como es costumbre en Made in Metal, decidimos abrirle las puertas y hemos quedado encantados con su debut discográfico.

Desde Rivas Vaciamadrid nos llega esta formación de  Death Metal Melódico con toques de Metal progresivo. Se formaron a finales del 2008. Este es su primer disco y desde el primer momento llama la atención lo cuidado de la caratula a cargo de Adri Anomia.  Una vez puesto el CD, la producción es más que decorosa, y aunque no está a la altura de las grandes producciones, algo por demás lógico, respeta básicamente el sonido y la mezcla suena bien, aunque nos hubiera gustado algo más de presencia de la sección rítmica, problema cotidiano en estos tiempos.

Y vayamos a la música. Después de una breve intro muy ambiental que te recuerda a películas catastrofistas sobre el futuro, comienza la espectacular “God is God” donde al menos en sus primeros acordes no nos permite adivinar por donde irá la banda. Los elementos death van entrando poco a poco, más que nada por la voz de Mike Vera, de dicción apreciable. Una línea algo depresiva que nos recordará a Paradise Lost y un efectivo uso de teclados.

“Soul Reaver” también comienza con un riff progresivo y ritmos enérgicos. A medida que avanzan, van fusionando estilos, en este caso con unas guitarras de corte metal épico. Y aquí destacamos a los guitarristas Rubén Vera y Alberto Baeza, dedicados mucho más a la composición que a intentar hacerse el guitar hero.

“Night Angel” es un death metal de corte clásico con una curiosa entrada de guitarras que van opuestas al ritmo de batería. Del mismo corte es “When the Demons Awake”, una composición que nos recuerda el death metal vintage, y a bandas clásicas como Amon Amarth. En su segunda mitad se despegan del directo y pasan a una faceta algo más heavy ochentera con un ambiente en segundo plano que no se adivinar si se trata de los teclados.

“Dawn of War” comienza con la voz de Paula Schultz. La diferencia la hace una canción muy atractiva. El inicio prog se va tiñendo de momentos oscuros para llegar a una sección black metalera por el uso de los teclados. En esta canción la mezcla de estilos es amplia, pero la composición resulta homogénea: power metal, NWOBHM, prog…todo en uno. Por primera vez escuchamos el bajo en toda su fuerza.

Luego de un “Interludio” que nos parece, ahora sí, prescindible, comienza “Son of Antares”. Por segunda vez tenemos que reconocer el curioso trabajo de Daniel García tras la batería, en este caso manteniendo un ritmo totalmente a sincopado contra el riff de guitarra.  Es una canción curiosa, muy agradable y compleja al mismo tiempo, con un toque oriental mezclado con thrash y doom. Las líneas de guitarra son sublimes.

“Black Flames of Chaos” resulta una composición algo más común, aunque nos vuelven a sorprender con esos cambios no solo de ritmo sino de estilo, con un toque cavernoso por momentos en la voz del magnífico Mike Vera, mientras que “Shadows in Darkness” comienza al más puro estilo del death metal noruego primigenio que posteriormente iran diluyendo hacia el death melódico más moderno con elementos góticos.

Finalizan con la canción titulo. Aquí amalgaman todo lo anteriormente presentado, incluyendo esos sencillos riffs de black metal noruego primario con otros mucho más complejos, los ritmos sincopados y los cambios inteligentes de estilo.

Magnifico disco. La música espectacular y la banda muy buena. Lástima que corran estos tiempos. El grupo tendrá que luchar mucho y muy fuerte para imponerse a pesar de la calidad sobrada. 

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