Tracklisting:
01. Mean Green Killing Machine (07:29)
02. Goddamn Trouble (06:21)
03. Our Finest Hour (05:49)
04. Shine On (06:03)
05. The Long Road (06:45)
06. Let's All Go to Hades (04:55)
07. Come Heavy (04:59)
08. Red White and Blue (05:05)
09. The Wheel (04:51)
10. The Grinding Wheel (07:55)
Es una gran noticia que bandas Thrash veteranas sigan metiendo caña y sacando material de primera fila, caso de Exodus, Testament, Kreator o los Overkill, que están en una segunda juventud desde el tremendo “Irounbound” de 2010, que para mi es uno de sus mas redondos CD's.
Yo los pude disfrutar en directo de teloneros de Rob Halford en su gira de Resurrection en la Aqualung de Madrid y doy fe de la mala leche que descargan sobre el escenario, ¡demoledores!
Desde que en 1985 arrancaran con su “Feel the Fire” los de Nueva Jersey han editado cojonudos trabajos como “The Years of Decay”, “Horrorscope” o “Taking Over” con ese thrash rápido y macarra que es tan eficaz como adictivo. La voz de Bobby “Blitz” y el bajo de Verni te taladran el cerebro y se graban a fuego en tu memoria. Bobby me recuerda a un Udo enrabietado cuando escupe sus frases.
Este “The Gridding Wheel” es bastante rápido en líneas generales, con cambios de ritmo y mucho trabajo de Ron Lipnicki tras los parches. Dos temas se pasan de metraje en mi opinión (mas de siete minutos) y otros lastran alguna parte central menos conseguida que no aporta demasiado, yo creo que con 4 o máximo 5 minutos se pueden resolver mucho mejor y el disco se hace mas dinámico y menos largo de devorar.
El disco trae diez canciones cuya tripleta inicial es cojonuda, mostrando el sello de identidad de los americanos, energía, ritmo trepidante, riffs entrecortados, punteos excitantes a cargo de Dave Lins y Derek “The Skull”, Bobby soltando gritos desgarrados, una carta de presentación que te deja satisfecho y demuestra que siguen en gran forma. Para mi la mejor de esta tanda es "Goddam Trouble", que junto con la devastadora "Red, White and Blue" son las mejores del trabajo.
Algunos temas tienen una intro donde la batería cobra protagonismo en plan marcial, caso de "The Long Road" y la que cierra el tema título, que se puede dividir en varias partes, empieza lenta y reptante cambia de ritmo acelerando infernalmente y en la parte media hay una parte con bajo que me recuerda algo a Steve Harris de Maiden, cerrando muy tétrico con voces en plan Black Sabbath. Esta se va hasta casi 8 minutos. Otra que mantiene el espíritu del Iommi setentero es Come Heavy con un guitarrazo muy de Tony.
Los coros también son marca de la casa y en ocasiones me recuerdan a los Anthrax del “Among the living o el “State of Euphoria”, también os reconozco que los Motör me vienen a la mente en algunas pistas, por el doble bombo y el tipo de riff que emplean (por ejemplo en "Our Finest Hour" en su parte central) y es que Lemmy ha sido influencia para tantos grupos thrash…
En algunas ediciones incluyen un cover de Thin Lizzy de su 'Emerald' pero llevada al estilo de los de Bobby, bastante resultona.
El disco no se anda con rodeos es efectivo y directo, no quiero aburriros con desgranado de tema a tema solo diré que no me gustaron del todo dos, "The Wheel" y "Let's All Go To Hades" las veo machaconas y faltas de ideas. Volviendo a mis impresiones finales sobre el trabajo no hay tiempo para las chorradas ni baladas ni cambios de estilo experimentales, es un thrash con sabor punkarra y machacón, que va a encantar tanto a sus seguidores de siempre como al que quiera un buen chute de adrenalina en vena, estará entre los importantes de 2017 en el estilo junto con el de Kreator, os lo aseguro. La portada no engaña, Overkill te machaca los huesos como esa maquinaria bien engrasada que muestra la calavera alada icono de la banda. No supera “Ironbound” (eso son palabras mayores) pero creo que si mejora lo ofrecido en el anterior “White Devil Armory”.
Line-up: |
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