eONE

Listado de temas:
01.- A New Day
02.- Nameless Walker
03.- Kings Of Carnage
04.- Soul Eater
05.- From Failure, Comes Clarity
06.- Blood Of My Enemies
07.- Snakeskinn
08.- Never Alone
09.- 5150
10.- Either Way You Lose
11.- A Walk Among The Dead
12.- Dark Waters

10/10

Sublime es lo que me ha parecido este inmenso trabajo por parte de la banda californiana, Winds Of Plague. Lo tiene todo para ser uno de los discos del año. Una producción excelente por parte de Will Putney (Body Count), unos temas que son una auténtica bofetada. El grupo viene a estar clasificado dentro del deathcore, algo erróneo desde mi punto de vista ya que tiene unos tintes sinfónicos que dotan al sonido de los americanos de una fuerza increíble y que es capaz de llegar a oídos de una audiencia muy amplia. Sus composiciones abarcan estilos desde el más salvaje deathcore a tintes más power si nos fijamos en los fabulosos coros llevan sus temas. Primer disco de su nuevo guitarra Justin Bock y de su nueva teclista, Adrienne Cowan.

Entrando de lleno en el trabajo, “A New Day” actúa a modo de introducción a lo que va a venir después. Una auténtica tormenta de cañonazos que empiezan con los teclados de Adrienne para abrir con la brutal “Nameless Walker”. El tema tiene unos cambios de ritmo por parte de Art Cruz que son una pasada. Jonnhy Plague es una jodida metralleta de guturales y el soporte que lleva en cuanto a coros es inmenso. “Kings of Carnage” consigue unir deathcore con hardcore todo ello aderezado por unas guitarras afiladísimas por parte de Bock y Michael Montoya. En el corte “Soul Eater”, el peso recae en los inmensos teclados de Adrienne dándole al tema una atmósfera black. “From Failure, Comes Clarity” tiene madera de single y, estoy seguro que será uno de los temas estandarte de sus directos. Coros pegadizos, buenísimas melodías que hacen de este, uno de los mejores cortes del disco. “Blood of my Enemies” es el tema que da título a este trabajo. Genial la voz melódica de Adrienne apoyando los guturales de Plague y, de nuevo, muy buenos cambios de ritmo.

“Snakeskin” llega a mitad de este trabajo y es un auténtico picotazo. Tiene unos coros tremendos. El comienzo me recuerda mucho a Slipknot. Cruz es una auténtica apisonadora con el doble pedal al igual que en “Never Alone”. Es el corte que ha ejercido de primer single de este “Blood of my Enemy” y, sin duda, es una muy buena carta de presentación donde todos los elementos principales de la banda hacen un papel brutal. “5150” comienza con una leve intro por parte de Adrienne para dar paso a las hostilidades vocales de Plague. El tema lleva un cambio a un tempo más lento en algunas partes del tema que, unido a los teclados, le dan una atmósfera más oscura. “Either Way You Loose” es otro tema con un peso fundamental del instrumento de Cowan. En el recae toda la base del corte dándole una fuerza tremenda. “A Walk Among the Dead” es un auténtico trallazo con unos riffs de guitarra que son un auténtico puñetazo y, de nuevo, unos coros inmensos y una parada pasada la mitad con un marcado golpe de bombo que, a mí personalmente me encanta porque te prepara para coger fuerza y terminar el tema como se merece. El broche de oro a este espectacular trabajo lo pone “Dark Waters” con unas guitarras limpias de inicio acompañadas por los teclados que darán paso al huracán que son Winds of Plague y terminar este trabajo repartiendo estopa como han hecho en todo el álbum.

En conclusión, para mí, un descubrimiento y uno de los mejores discos que he escuchado en este 2017 sin lugar a dudas y que recomiendo a todo amanta del metal, que no deje pasar la oportunidad de escucharlo detenidamente.

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