Athanai personalmente me había invitado al concierto de presentación de su disco Creando Milicia, con el que intenta volver a tener presencia musical después de cuatro intensos años de trabajo para lograrlo. Sin amilanarse ante la situación y las historias de la crisis, el hombre se ha lanzado con un disco autoproducido y la posición de defender su música donde sea necesario.

Con cierto retraso sobre la hora prevista salieron a escena en formato de cuarteto, destacándose Dayan Abad a las guitarras, único músico de los que ha grabado el disco que continua con las presentaciones en directo. Estaba claro que el concierto tenía como objetivo defender en directo las canciones recién grabadas, ya que de los 12 temas que el mismo contiene, 9 fueron tocados por la banda esta noche, comenzando con el primer tema, “Terrorismo”, y continuando con “Acido” y “Dilema familiar” que son precisamente los tres primeros de Creando Milicia. Harushoshi Mori Morales, al bajo, ponía un buen ritmo, marcando la caencia de las canciones, mientras el baterista, cuyo nombre les debo, se destacaba por improvisar sobre los números, y al mismo tiempo, trabajar el background vocal con una laptop a su derecha.

A continuación el músico retomó algunos temas de discos anteriores, “Nirvaneando” fue la elegida, un tema con influencias de ya saben ustedes quien, algo que se nota no solo en esta canción, sino en buena parte de la obra de Athanai, su devoción por el rock alternativo de Seattle de principios de los 90.

Volvieron con “Alquiler”, mientras Athanai promocionaba la venta de su disco. La sala estaba a capacidad media, a pesar del precio de la entrada, que incluía un generoso vaso de cerveza, y entre el público predominaban los cubanos, entre ellos algunos de los que han recibido agradecimientos por el apoyo al cantante en la creación de este disco, como Felix Varela (un joven que también nos enseñará a pensar) y Ricardo Barroetaneña, cuyo apellido muchos confunden a la hora de escribirlo, a tal punto que no sé si he sido yo quien lo escribo mal o está mal escrito en los créditos del disco.

“No lo haré” recordaba composiciones anteriores, así como “La loma” y “Muevelo un poquito”, que Athanai presentó recordando su primera visita a España y el cariño con que fue recibido en el sex shop de Atocha, donde era asiduo visitante. Durante todo el concierto, las bromas y “el cuero” fueron temas predominantes entre canción y canción.

Con “Registro” volvían a una de las nuevas composiciones donde se mezclan las experiencias vividas por el cantante ya sea en España o en Cuba, las que se reflejan una vez mas y con mucha cubanía en “Tu no das na”, dedicada a todos esos que si no existieran nos harían la vida mejor, para pasar a “Guarrilleros”, una de las composiciones más fuertes del disco, que mezcla dos vocablos en ella: “guerrilleros” y “guarros”.

En la recta final hubo una mezcla de canciones antiguas, “Di quien fue”, aunque no tanto (eché de menos las de hace veinte años), con la de su último video clip, “Trabajar”, para volver con su oda personal a La Habana, que no es otra que “Habanero”, la cual terminó para dar paso a otro tema improvisado, acompañado solamente del guitarrista Dayan Abad, que todo el mundo en la sala se sabía y coreó… menos yo.

El concierto terminó con “Septimo cielo”, canción que da título al disco que lo dio a conocer en España y significó el éxito más importante del cantante, y que en Creando Milicia también cierra el disco, grabada en directo. Fue un concierto magnifico, aunque Athanai se acusó a sí mismo de estar un poco fuera de forma, algo que retomará tan pronto vengan nuevas fechas de conciertos. Cinco minutos después, el músico estaba entre el público dispuesto a beberse todas las cervezas a que era invitado, besuquear a todos los viejos amigos y a los nuevos, y autografiar todos los discos que se hubieran comprado. Fue una magnifica noche que pudimos disfrutar todos los presentes.

Si quieres leer una critica del nuevo disco, Creando Milicia, la puedes leer pinchando aqui

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