15 de Junio 2016
Sala Santana 27
El miércoles 15 de junio asistimos al concierto del conocido guitarrista Zakk Wylde en la sala Santana 27 de Bilbao. Esta vez venia presentando su nuevo y segundo disco en solitario 'Book Of Shadows II', veinte años después de su primer lanzamiento en solitario, muestra su lado más personal y acústico.
En esta gira Zakk se hace acompañar de sus compañeros de Black Label Society, es decir John DeServio al bajo, Jeff Fabb batería y Dario Lorina guitarras y piano.
A diferencia de los conciertos de Madrid y Barcelona donde Jared James Nichols hizo de banda soporte en Bilbao los teloneros fueron los navarros Ciclonautas, un power trío rockero compuesto por el cantante y guitarra argentino Mai Medina, Alen Ayerdi en la batería, conocido por ser el batera de Marea y el bajista Javiertxo Pintor.
A la hora acordada comenzaron su descarga, no les conocía más que de nombre, y no sé si muchos de los presentes les conocerían aunque si habían algunos asistentes a mi alrededor muy animados con sus canciones. Dieron un concierto muy aseado donde descargaron unos cuantos temas en los que combinan el rock urbano y el rock argentino con muchas otras pinceladas Stoner, Blues, rock sureño y rock and roll de toda la vida.
Un breve paseo por la zona del merchadising descubrimos unos precios un tanto elevados para lo que se acostumbra a ver por estos lares, había bastante variedad y aunque no vi a nadie comprando fijo que alguno se fue a casa con algún artículo como recuerdo del concierto. Es que la asistencia era bastante escasa, yo calculo uno 240 personas, o algo así. Pero al parecer por la sola asistencia, (teniendo en cuanta el alto precio de las entradas y siendo miércoles) allí estaban los fans más fieles, o al menos una buena parte de ellos, habían muchos con pintas de moteros y también presencia femenina. La verdad es que era un público bastante heterogéneo.
Yo confieso que no está muy seguro que me encontraría, si es verdad que había visto setlist de otras ciudades y tenía claro lo que tocaría pero no el cómo, es decir, si totalmente acústico o eléctrico. Pues fue enchufado, así que supero mis expectativas, supongo que peor le iría a los que esperaban canciones de Black Label Society, porque lo que recibió fue mucho más melódico.
Tocaba tomar posiciones para disfrutar del concierto del hacha rubio. Nos habían avisado que solo se podrían hacer fotos en la primera canción. Salían a escena con la tranquila "Sold My Soul" que empalmo con un extenso solo de guitarra que entre pitos y flautas duro unos 10 minutos nos sirvió para retratar al fotográfico Zakk y sus chicos. Luego el gardeo con las cámaras de fotos fue intenso, a alguno sacaron de entre el público y le llamaron la atención a algunos que inocentemente pensaron hacer fotos desde dentro del público. Algo que me parece desproporcionado, pero supongo que cada estrella tiene sus manías.
Vayamos de nuevo a la música que es lo que verdaderamente importa. Cayeron tres del nuevo disco “Book Of Shadows II” y en su mismo orden, la melancólica "Autumn Changes", seguida de la sentida "Tears Of December" y la bella "Lay Me Down". Le siguió "Road Bacck Home" en la que Zakk se sentó al piano y dejo la guitarra al espigado Dario Lorina, que os recuerdo ha tocado con Jani Lane de Warrant y con Lizzy Borden. Hay que decir que hasta este momento ninguno de los músicos se había dirigido al público, solo se limitaban a tocar los temas, cuando se sentó al piano Zakk entonces brindo con el público con una taza en su mano.
Siguieron con otra de las nuevas, "Yesterday's Tears" para luego Zakk introducirnos con armónica en uno de sus interminables solos, que puso los pelos de punta a todos los allí presentes. Y es que si por algo se caracteriza este hombre, es porque sus solos te motivan sí o sí. Vaya "animal" es este tipo, no sé cómo coño lo hace, pero es una máquina de fabricar solos de guitarra. Tomo de nuevo la armónica para tocar la sureña "Between Heaven and Hell" y de seguido "Darkest Hour" otra de la nueva hornada, me gustó mucho en directo. Contaron con un excelente sonido durante toda la actuación.
Los preparativos de la seguridad al lado de la escalera que baja del escenario delataban que el guitarra bajaría a tocar otro de sus mastodonticos solos entre el público. Y así fue en medio de otro extenso solo bajo del escenario y como si fuese una procesión, seguido por una comitiva de técnicos que sostenían en alto el cable de la guitarra y la seguridad se formó un circulo de fans a su alrededor y el melenas nos deleitó con otro arrollador solo, marca de la casa, durante el cual toco con los dientes se puso la guitarra tras el cuello, mientras el público que lo rodeaba sacaba fotos y grababa videos sin cesar con sus móviles. Luego volvía en procesión hacia el escenario para cerrar el extenso alarde guitarrero del que presume.
Ya a estas alturas se le veía mucho más animado, y continuo con sus poses fotogénicas. Ah y mostró su extensa colección de guitarras Ltd personalizadas de todo estilo y color, cada una de ellas más espectacular. Prosiguió con un par de temas viejucos "Throwin' It All Away" y "Dead as Yesterday", no recuerdo en cuál de las dos contó con la guitarra acústica de Dario Lorina o tal vez fue en "Eyes Of Burden" una las buenas nuevas. Vocalmente un poco más exigido en la melodiosa "Way Beyond Empty".
Para "The King" Wylde se volvió a sentar al piano y toco a capela esta canción. Tras lo cual tuvo una animosa presentación para cada uno de los miembros de la banda, a cada uno le dedico unas graciosas palabras. Para atacar con los dos temas finales de la velada, así dono la cálida "Lost Prayer" y cerraron con la mágica "Sleeping Dogs" su tema más conocido y probablemente el más completo de su nuevo trabajo.
No se marchó sin dar las gracias y bendecirnos, todo esto lo hizo efusivamente, tanto que a mí personalmente me sorprendió teniendo en cuanta que la primera parte del show había sido muy fría en cuanto a relación con el público. Lo cierto es que se fue animando, ganado enteros y termino siendo un bolo muy íntimo y sentido. Así que todos contentos para casa.