Viernes 14 de Julio
Tal y como comentaba anteriormente, el viernes era el día más duro del festival en el que casi todas las bandas eran golosinas con lo que a pesar de la intensa lluvia a las 11:30 estábamos como un clavo para ver a los suecos Dead Lord dar el pistoletazo de salida a la segunda jornada inmunes a la tromba de agua que estaba cayendo durante prácticamente todo su concierto. Ya pudimos presenciar la semana pasada en el Stonefest de Asturias lo que ha crecido esta banda y de nuevo volvieron a demostrarlo con un magnífico show con su habitual regusto a Thin Lizzy y Gary Moore en el que repasaron ampliamente sus dos discos. No hay nada mejor para empezar el día.
Bullet venían a continuación y a pesar de ser una banda que siempre entran bien en directo, les noté faltos de práctica, y es que llevan bastante tiempo con poca actividad y eso se nota. No se puede decir que fuera un mal concierto y excepto los dos primeros temas, tuvieron un gran sonido, igual que su compatriotas Dead Lord, pero faltaba ritmo, cohesión y entre tema y tema la cosa perdía fuelle. También se ha notado la baja de Adam Hector en las filas de la banda, ya que el nuevo bajista no tiene ni la mitad de carisma que su predecesor. Aún así, el set list acompañó con "Storm Of Blades" para abrir, "Riding high", "Heading For The Top", "Dusk Till Down", "Bang Your Head" y "Bite The Bullet". Esperemos que vuelvan a la actividad porque tienen bastante más que ofrecer que lo que nos dieron el viernes.
Una de las golosinas del festival, y no porque sea una banda difícil de ver, eran Grim Reaper. Como sabréis el bueno de Steve tuvo que ser operado por una infección hace unos meses y a pesar de salvar su vida de milagro, perdió la pierna derecha, con lo que este era el primer concierto que ofrecía después de el fatídico hecho. Inasequible al desaliento en infatigable trabajador del metal, salió al escenario en silla de ruedas, que abandonó rápidamente para entonar "Wings of Angels" de su nuevo álbum, que sin estar a la altura de los clásicos, entra genial en directo.
A continuación la descarga habitual de la banda con "Rock You to Hell", "Night of the Vampire", "Lust for Freedom…" durante los cuales Grimmett iba alternando partes en la silla de ruedas y otras apoyado con una muleta en su recién estrenada pierna metálica. Incluso llegó a bromear con que ahora es más metálico que ninguno de nosotros. "Walking in the Shadows", "Rock Me Till I Die" y la versión de "Don’t Talk To Strangers" del jamás olvidado Dio. Sin duda un enorme show de un incansable gudari del Heavy Metal que ha sabido superar un lance del destino que habría hundido a la mayoría. Larga vida a Steve Grimmett y Grim Reaper!!!
De Lee Aaron he de decir que no esperaba demasiado y me sorprendió muy gratamente. Nunca había tenido ocasión de ver en directo a la Metal Queen canadiense pero los vídeos de sus últimas actuaciones que circulan por internet no auguraban nada bueno. Aún así nos acercamos y comprobamos que la banda suena ahora mucho más compacta y ella está en un estado de forma y voz envidiables. Basa su setlist en clásicos más hard rockeros como "Some Girls Do", "Whatcha Do to My Body" o "Fire and Gasoline" aunque "Metal Queen" y "Hot to be Rocked" sonaron tremendas.
Después de la leyenda canadiense descendíamos un poco en el mapa y nos acercábamos a primeras fila para presenciar a unos de los que unos que nunca fallan: Riot V. A pesar de haber perdido a su alma mater, Mark Reale, hace unos años, son otra banda luchadora como pocas, que siempre han estado ahí derrochando calidad y la formación nueva, si bien ya sonaba atronadora desde el principio, cada vez es más insultantemente potente. La voz de Todd Michael Hall brilla por encima de todo pero las guitarras de Mike y sobre todo Nick son dos cuchillas que arrasan al igual que la batería de Frank Gilchriest y el bajo de Don Van Stavern, que son dos martillos que golpean incansablemente. Arrancaron con "Rock Hard Live Free" y a partir de ahí nos fueron deleitando con un temazo detrás de otro: "Thundersteel", "Swords and Tequila", las emotivas "Bloodstreets" y "Take Me Back, Warrior"… En definitiva, una vez más, uno de los puntos álgidos del festival. Shine on Riot!!!
Nunca viene mal poner el contrapunto a una banda como Riot con algo un poco más tranquilo, y qué mejor que Magnum para ello. La veterana banda británica suele ser una de las que derrochan clase allá por donde van y BYH no iba a ser una excepción. Si bien es cierto que la voz de Bob Catley envejece con él y empezó algo flojo, fue calentando y tanto clásicos como temas de su último álbum sonaron genial. Siempre es una lástima ver a este tipo de bandas en un festival, ya que acostumbran a hacer sets mucho más largos y muchas canciones se quedan en el tintero, pero igualmente, "On a Storyteller's Night", "Vigilante", "How Far Jerusalem" o "Les Morts Dansant" son un placer auditivo sin igual. Espero que se animen a girar por la península y podamos verlos como merecen sin tener que desplazarnos por Europa.
A las seis y media de la tarde saltaban al escenario los suizos Krokus, que a pesar de ser una banda con una amplia trayectoria y que hasta hace no mucho daban grandes conciertos, llevan ya unos años que han perdido un poco el norte. En el Rock Fest del año pasado ya estuvieron más flojos que en otras ocasiones, lo mismo pasó este año y en Bang Your Head han seguido en esta tónica. 3 versiones en un concierto de 70 minutos, poco dinamismo entre tema y tema… Exceptuando "Screaming in the Night" que les salió aceptable, un concierto que pasará sin pena ni gloria. Esperemos que recuperen el rumbo.
Haciendo tiempo mientras esperábamos a Rose Tattoo, nos acercamos al halle a ver a Paragon. Defensores a ultranza del heavy metal más clásico comandados por el siempre simpático Andreas Babushkin nos dieron lo que mejor saben. Metal alemán sin edulcorantes directo como un puñetazo en la cara. Puede que no sea una banda que aporte demasiado al panorama pero siempre es agradable disfrutar de sus conciertoS.
No pudimos presenciar el show de Paragon en su totalidad ya que se solapaban con Rose Tattoo y hace tiempo que no es una banda fácil de ver por el viejo continente. Angry y sus secuaces tiraron de clásicos asegurando un gran concierto desde el primer tema. "Out of this Place", "Assault & Battery", "Tramp"… sonaron atronadores desde el primer minuto. Así se empieza una fiesta de rock n roll!!! Parece que no pasan los años por el canijo aussie, que viene rodeado de una banda sólida y profesional. "Rock 'n' Roll Outlaw", "Scarred for Life" o "Black Eyed Bruiser" nos pusieron a todos a saltar para despedirse con "Nice Boys". Grandes los tatts!! Ya podrían acordarse más a menudo de Europa aunque les pille un poco lejos. Se les echa de menos por estos lares.
Después de la fiesta de los australianos le llegaba el turno a un personaje querido y odiado a partes iguales al cual personalmente definiría como ridículo, y más visto el bochornoso espectáculo del viernes. Vince Neil convertido más en un juerguista obeso que en el cantante de una banda de hard rock saltó al escenario acompañado de la banda de Slaughter cuya solvencia ya pudimos comprobar durante el concierto de este. Hacen buenos coros, dominan sus instrumentos y hacen que la cosa suene, pero si por encima de ellos tienes a una gallina rubia berreando y corriendo por el escenario, la cosa está complicada.
Personalmente nunca he sido un gran admirador de Mötley Crüe pero tenía curiosidad por ver cómo se desenvolvía su frontman en el escenario hoy en día pero después de un "Dr Feelgood" con la mitad de las voces pregrabadas y el resto sonando como un gato ahogándose la cosa quedó clara. El señor Vince tenía 90 minutos de show de los cuales aprovechó 50 y se ausentó unos 15 para que su banda hiciera un medley con "Whole Lotta Love", "Heaven and Hell" y "Stairway to Heaven". Suficiente amigos. Tiempo de ir a tomar algo al irlandés del pueblo y dejar descansar nuestros oídos. Al día siguiente nos enteramos de que el propio organizador del festival salió al terminar el show para pedir disculpas por el lamentable espectáculo. ¿Alguien esperaba otra cosa?.