Sábado 15 de Julio 2017
Último día en Balingen que se presentaba más tranquilo que el anterior pero aún así se nos pegaron un poco las sábanas (la noche anterior tuvimos que beber para olvidar a la gallina Vicente) y llegamos al principio del segundo concierto del día. Vain. Personalmente he de admitir que su estilo de Hard Rock angelino no es santo de mi devoción pero los chicos se lo curran y saben lo que hacen. La voz de Davy Vain sí que está algo resentida con el paso de los años pero se sigue moviendo y poniendo la carne en el asador.
Raven es una banda que no suele decepcionar en directo y esta no fue una excepción. Los hermanos Gallagher, esta vez acompañados por un nuevo batería ya que el legendario Joe Hasselvander sufrió un infarto hace unas semanas siguen mostrándose enérgicos descargando su athletic rock, como ellos lo denominaron en los 80, sin dar tregua.
Empezaron sonando bastante turbios y embarullados pero en un par de temas fue aclarándose para terminar dando un concierto potente, limpio y del que mucho tienen que aprender bandas más jóvenes. No faltaron sus clásicos temazos "Mind Over Metal", "Faster Than The Speed Of Light", "On and On"… Una vez más: La New Wave no falla!
Por si nos habíamos quedado con ganas de NWOBHM venía otro de los pesos pesados del género: Diamond Head. Siendo una de las bandas más influyentes en la historia del Heavy Metal, estos británicos han tenido muchos altibajos en su carrera y nunca se sabe muy bien lo que se va uno a encontrar, pero esta vez tocó el día bueno. Siendo Brian Tatler el único miembro de la formación original desde hace ya muchos años, todo depende de quién venga acompañado, ya que su buen hacer a la guitarra está asegurado. Parece que por fin ha logrado una banda solvente con un cantante que realmente se ajusta a lo que Diamond Head necesita.
Rasmus Bom Andersen es un joven vocalista con carisma, buena voz y parece que con bastantes tablas, a pesar de que no he encontrado referencia alguna a su anterior trabajo en Internet. El set list del concierto fue un buen repaso a los clásicos dejando caer algún tema nuevo como "Bones" o "Diamond"s, que en directo suenan mucho mejor que en estudio. "In The Heat Of The Night" nos hizo volar y disfrutamos a gusto con "It's Electric", "Helpless" y "Am I Evil?". De verdad me alegro que por fin hayan encontrado su rumbo. Espero que Rasmus haya venido para quedarse y sigan en esa línea ascendente.
Otra banda de la que nunca sabes qué esperar son los yankis Vicious Rumors, pero por si acaso siempre hay que acercarse ya que les hemos visto dar conciertos tremendos con diferentes vocalistas. Esta vez está de vuelta en sus filas el ya veterano Brian Allen que después de encuentros y desencuentros con la banda parece que ha llegado a algún acuerdo con ellos. Desde el primer momento salieron con ganas, corriendo por el escenario y escupiendo un temazo detrás de otro. "Worlds and Machines", "Digital Dictator", "Out Of The Shadows" y "Hellraiser" como un puñetazo en los morros nada más empezar. "Murderball", "Down To The Temple"… y sin bajar el pie del acelerador "Soldiers Of The Night" y para terminar "Don’t Wait For Me" dejando el listón en lo más alto. Muy bien Thorpe y sus secuaces esta vez.
Como ya habíamos tenido suficiente ración de Hard Rock de Los Ángeles con Vince, Vain y Slaughter y no queríamos ver dar pena a nadie más decidimos pasar de Dokken y esperar a Michael Schenker tomando unos refrigerios en el coche, que siempre se agradece en estos festivales. El axeman rubio se presentaba esta vez con un line up muy especial acompañado de sus tres cantantes Graham Bonnet, Gary Barden y Robie McAulay, Ted McKenna a las baquetas, Steve Mann al teclado y guitarra y Chris Glen al bajo. Con semejante nivel de músico solo se podía esperar lo mejor y eso fue lo que el gran Michael nos dio. Un temazo detrás de otro sonando mejor que ninguna otra banda del festival. a Gary Barden le tocó la tarea de calentar al personal con "Let Sleeping Dogs Lie", "Victim of Illusion", "Attack of the Mad Axeman" y "Armed and Ready" para dejar a Schenker deleitarnos con "Coast To Coast" e introducir en escena a Graham que se presentó ataviado con su traje y corbata habituales y bordó "Desert Song", "Dancer" y "Assault Attack".
El segundo interludio instrumental que sirvió para que Robie McAulay saliera al escenario fue "Captain Nemo". "Bad Boys", "Love Is Not a Game" y "Save Yourself" sonaron a gloria aunque se hicieron cortas para ser de una época de la carrera del guitarrista que no solemos ver a menudo en un escenario. "Rock Bottom" y "Doctor Doctor" pusieron el broche de oro a una enorme actuación que por suerte podremos disfrutar de nuevo en la península el próximo otoño. Si os gusta Schenker, no os lo perdáis porque esta es la mejor ocasión para ir a verle!!
Hammerfall prometían un show especial, con mucha pirotecnia, muchas luces, músicos invitados y demás elementos de fin de fiesta así que a pesar de ser una banda que ha perdido bastante interés con el paso de los años nos quedamos para ver lo que nos ofrecían y la verdad, me resultó un tanto decepcionante, y mucho más después de la apabullante maestría de Schenker y su séquito. Si bien es cierto que cayeron bastantes temas del primer disco como habían prometido habría estado tocarlo entero en orden y seguido, los colaboradores al violín no dieron demasiado juego. Igualmente creo que fue un show que los fans disfrutaron y gozó de un sonido de 10.
Con esto termina una vez más el que para mi gusto es el mejor festival grande de Europa. Esperemos que el año que viene vuelvan a montar un cartel atractivo y repitamos ya por enésima vez nuestra visita al precioso pueblo de Balingen.