16 de Noviembre de 2017
Sala Stage Live

Ver a Master en vivo, aunque fuese 27 años después de escucharles por primera vez en mi natal Cuba, este ha sido un sueño cumplido. Si amigos, uno de esos pequeños sueños de juventud, que se hizo realidad el pasado 16 de noviembre cuando Paul Speckmann y sus chicos aterrizaron en Bilbao como parte del 'Omens Of Death Tour', eso en lo personal. Para Bilbao era el retorno de Master 27 años después, ya que en 1990 actuaron en el desaparecido Frontón de La Esperanza, en un cartelazo de lujo junto a Pungent Stench y Abomination. Un concierto muy recordado por estas tierras y del que un buen amigo me ha hablado mucho.

Para esta gira Master se hacen acompañar de los belgas Dehuman, con quienes sacaran un split álbum titulado “Decay Into Inferior Conditions”. Los teloneros eran los locales Sönambula, así que allí que nos fuimos a disfrutar de estas tres bandas de death metal de muy distinto pelaje.

Cuando arranco el concierto de Sönambula descubrimos que tenían una nueva bajista, se llama Estrella y este fue su debut en directo con la banda death bilbaína formada por Rapha en la voz y la guitarra y Maider en la batería. Arrancaron su concierto con el tema "Lascivia" uno de sus primeros temas. El sonido era bueno, las luces fatales, como casi siempre en esta sala, Los focos te apuntan directo a la cara y no te dejan hacer fotos mientras la banda permanece en una penumbra. Así que tuvimos que sacar el flash no quedaba otra. La segunda que tocaron fue "Typhareth", de la que sacaron un vídeo hace un tiempo.Aunque son death doom, algunas guitarras siempre me recuerdan a los primeros Entombed, salvando las distancias claro esta.

A la nueva bajista se le vio bastante suelta, por momentos muy centrada en su instrumento, aunque también animo al público con sus gestos y cuajo un buen concierto, como toda la banda. Otras piezas que cayeron esa noche fueron la robusta "Satanas", molan las guitarras crujientesy la gruesa línea de bajo de "Esperpento", tocaron otra que no conocía y cerraron con la aplastante "Nido De Suciedad".

Llegaba el momento de ver a los belgas Dehuman, el combo de Bruselas tuvo algún problemilla de sonido sobre el escenario, a nosotros nos llegaba potente. Estos chicos dieron un concierto arrollador, es una banda que no controlo mucho la verdad, pero si os puedo decir lo suyo es el death metal un poco más técnico, sin perder la perspectiva brutal y con claro toque old school. Venían presentando su más reciente álbum 'Graveyard Of Eden', publicado en 2016.

Dehuman lo forman los miembros originales, el bajista y cantante Andrea Vissol y el guitarra Raphaël Sellekaerts, el batería es Laye Louhenapessy, y el nuevo miembro que entro este año en la otra guitarra, se hace llamar Lou-Indigo. Meten buenos solos de guitarras, que se repartían ambos hachas. La sección rítmica es robusta y la voz de Andrea que es bien profunda.

Temas acelerados que hicieron mover algunos cuellos, aunque la verdad el público estuvo bastante frio o expectante con el concierto de los Dehuman, la banda lo dio todo y no se le puede reprochar nada. Aunque para mi gusto al final se me hacían un pelín lineales.

Llegaba el momento de ver en escena a Paul Speckmann y sus eternos Master. El voceras había estado en el puesto de merchandising atendiendo el mismo y haciendo fotos con todo el que se lo pidió. Yo no me atreví y me arrepiento. Paul lleva más de 12 años radicando en la república checa, los dos miembros que le acompañan desde 2003 son checos, el batería Zdeněk Pradlovský y el guitarra Alex Nejezchleba, conformando un trío que machaca cráneos a golpe de death metal old school.

En este Tour venían presentando su último álbum 'An Epiphany of Hate', que editaron en 2016 con el sello F.D.A. Rekotz. Pero por supuesto que caerían un motón de viejos temas que estábamos ansiosos por disfrutar en directo. Arrancaron con "Pledge Of Allegiance", la pieza que abre el mítico LP homónimo. Sonidazo y vaya vozarrón que conserva Mr. Speckmann. Los primeros guitarrazos anunciaban "Master", temón trepidante, lo mismo que la más actual "Subdue the Politician", que abre su más reciente obra. Buena parte del respetable se movió con piezas infecciosas como esta, no solo veníamos a por temas clásicos, unos cuantos se arremolinaron en un alocado mosh pit.

No menos mítico es el álbum 'On The Seventh Day God Created… Master', la segunda obra de larga duración del grupo en la que tocaba la guitarra Paul Masvidal (Death, Cynic). De este disco tocaron dos temas seguidos “Judgement Of Will” y  sin apenas pausa caía “Submerged In Sin”. El batería Zdeněk lo daba todo tras su kit, como lo gozo el tío durante todo el concierto. Marcando el ritmo en la gloriosa "Unknown Soldier", que fue una de las mejor recibidas. Momento para la infecciosa versión de "Re-entry And Destruction" de su anterior banda Death Strike, que fue el germen de Master. Una mirada al disco de 1993, con la pieza que le da título "Collection Of Souls", Paul estuvo meneando sus greñas y su larga barba al ritmo de este corte infernal.

La maravillosa contundencia de "The Truth", otra pieza original de Death Strike, que termino formando parte del disco debut de Master. Me sorprendió gratamente el hábil guitarra Alex Nejezchleba, posee un estilo muy old school, pero tremendamente efectivo. Un estilo guitarrero que euedaba patente en otro tema de la vieja guardia y muy apreciado, hablo de "Mangled Dehumanization", tralla infecciosa ante la que casi ninguno de los presentes se pudo resistir. Brutal demostración de poderío death metalero a cargo de este señor que es historia viva del género.

De la recta final recuerdo la pútrida "Cut Through The Filth", luego otra de Death Strike y que se titula "Remorseless Poison", la incendiaria "Pay To Die" que alguno había estado pidiendo con insistencia y que desemboco en el solo de batería de Zdeněk Pradlovský. Para cerrar con "Special Skills" del álbum 'Four More Years Of Terror' de 2005, una pena que no tocasen la versión de "Children Of The Grave" de Black Sabbath. Porque en el setlist la tienen pero aquí decidieron acortarlo o yo no me entere. Tengo una gran duda, igual estaba muy metido en las fotos y no preste atención pero juraría que no la tocaron.

Fue un gran concierto y me alegra mucho haber estado allí. Me siento uno de los afortunados que estuvo el día que una leyenda viva del death metal como Paul Speckmann piso Bilbao por segunda vez. Imagino lo que tuve que ser para los que se re-encontraban con Master. Resumen una noche para recordar.

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