Desde que comienza este disco ya sabes que te va a gustar. Música refinada, exquisita y bien hecha. Diesel Dahl es el batería de TNT, pero no es el personaje principal de esta historia, sino sus compañeros Tom Sennerud (guitarra), Frode Henriksen (vocal) y Jon Johannessen (guitarra), quienes coincidieron en TNT y luego decidieron formar una banda en 1996, Stoneflower.

Sacaron un primer disco y luego comenzaron los problemas habituales cuando se fue Johannessen y  Frode Henriksen se mudó a otra parte del país en 2010.  Hablamos además de una banda poco productiva.  Tres discos de 1996 a hoy.

Para esa época, Tom pensó que el disco que estaban grabando no debía quedarse en el aire y lo sacó bajo el nombre de “Destination Anywhere” con su propio sello, Late Night Music. El CD ganó en la categoría de “best AOR album 2014” (Sweden Rock Magazine). Cuando vieron esto, Tom y el bajista Svenn decidieron reformar la banda y darse otra oportunidad.

Por suerte encontraron al vocalista John Masaki (“Norwegian Idol“) que es el alma de este CD. Buscaron al afamado batería Per Hillestad (Lava, A-Ha,) pero luego pensaron que mejor tener un batería a tiempo completo y escogieron al hermano de  Svenn, Geir Johnny Huneide quien grabó la mayoría del álbum.  Las otras canciones las tocó  Leif Johansen’s (21 Guns, Phenomena, A-Ha)  en el Stable Studio.

El resultado es un disco engarzado con preciosismo de orfebre. Un montón de canciones magnificas con el toque mágico del AOR  y un vocalista que tiene el alma en la punta de la lengua y que derretirá con sus versos hasta el oído más duro.  Cada canción está pulida hasta el detalle más mínimo y la banda ha decidido que más allá de la maravillosa voz de John Masaki todo lo que queda es reforzar la belleza de su timbre con la belleza de las guitarras y los teclados. Algunas canciones te recordaran la principal influencia de esta banda que son indudablemente los Toto menos melosos.

De Masaki hemos dicho solo elogios, su timbre cuando sube se parece mucho al de otro vocalista que tampoco fue muy prodigo, Max Bacon. Max es quien canta “When the Hearts Rules the Mind”, que seguro por el nombre no lo recordabas.

Un preciosismo sin límites, pero no creas que esto implica ablandamiento. ¡No! Las guitarras marcan riffs que para los amantes de las cuerdas serán agradables, mientras que los teclados adornan discretamente cada pieza. Ambos instrumentistas hacen solos discretos que incluso no siempre están en primer plano. La sección rítmica simplemente cumple. El punto fuerte de cada pista está en los arreglos, los coros, las armonías y el sentimiento.

Si no escuchas este disco, lo más probable es que no sepas más de la banda hasta dentro de algunos años. A veces lo veo como un disco de un proyecto efímero, y lo siento, pero si ves la propia historia de Stoneflower y sus esporádicas obras, te darás cuenta que hay mucha razón en pensar así.  Un disco que posiblemente a los más metaleros dañará los oídos, pero que a los amantes de la música gustará por su detallismo casi academicista.

El disco se grabó en los Late Night Music. Otros artistas invitados son en  “Finally” Per Hillestad (batería), Tommy Denander (guitarra, Paul Stanley, Alice Cooper, Steve Walsh, Fergie Frederiksen), Bjørn Ole Rasch (teclados, Secret Garden) y Gunnar Westlie (guitarra, Da Vinci, Road). El disco fue mezclado por Trond Engebretsen y Tom Sennerud, masterizado por JK Northrup (King Kobra).