8 y 9 de Junio de 2018
Otero Brutal Fest, Oviedo.
Viernes 8 de junio
Junio, se acerca el veranito, el calorcito y cómo no, los festivales. Uno de los primeros es el Otero Brutal Fest, aunque atrasasen un mes esta sexta edición, no nos libramos de las lluvias torrenciales. Este año han optado por un cartel menos espectacular, pero arriesgándose con dos cabezas de cartel muy potentes y reconocidos de la escena death metalera sueca. Aunque no estén en su mejor época Grave y Entombed A.D. ofrecieron unos señores conciertos.
Como el año pasado las previsiones del tiempo asustaban, se esperaban lluvias y tormentas durante todo el fin de semana. Menos mal, que los organizadores son previsores y todo el festival esta resguardado bajo una enorme carpa. Los servicios e instalaciones del festi no variaron mucho del de años anteriores, la única diferencia notable fue que sacaron los puestos de comida fuera de la carpa, aumentando el aforo de la misma.
Por motivos laborales, se me hizo imposible llegar a primera hora el viernes, perdiéndome unos de los últimos directos de la banda madrileña Humano. Una pena que esta bandaza de DeathMetal dejen la música se les echara mucho de menos.
Según aparqué el coche en el parking del estadio Carlos Tartiere, se podían escuchar los inconfundibles berridos y guturales de Antonio Ramirez, frontman de Evil Impulse. Desplegaron un mezcla muy cañera y contundente de Death Metal, Southern Metal y Groove Metal. Una banda muy potente y muy explosiva que dio muestra de su brutalidad con temas como “Infernal” o “Lobotomizer”. Finalizaron el concierto con “Rednec” una increíble cover de Lamb Of Good con la que no pude evitar descolgarme las cámaras y cantar junto a ellos en primera fila.
Cannival Grandpa fueron los siguientes en saltar al escenario. Aunque sea una banda con dos álbumes y una corta andadura, les podemos considerar uno de máximos representantes del deathcore nacional. No fue su mejor día, el técnico genero una gran bola de graves y no se podía diferenciar ningún instrumento con claridad. El técnico de sonido no supo sacar el sonidazo que tiene que tiene la banda.
Gama Bomb fueron la gran sorpresa del día para un servidor. No los conocía y no había escuchado nada de ellos, pero me gusto muchísimo su mezcla de Thrash Metal con toques de crossover. Philly Byrne dio un concierto perfecto vocalmente y su actitud durante todo el concierto fue impecable, se bajó del escenario varias veces y en los parones fue un tanto vacilón, sacando una carcajada a muchos de los asistentes. Los temas son rapidísimos y no puedes evitar guitarrear, corear y moverte con ellos durante todo el bolo.
Llegaba uno de los momentos cumbre de la noche, Desakato empezaba a preparar todo el escenario para el que seria el mejor concierto del día y por que no decirlo del festival. Desde siempre me he declarado fan de la banda, pero el cociertazo que dieron en el OBF fue brutalisimo. Subieron un gran fondo y colocaron sus propios focos, que junto a una gran cantidad de humo y un sonido aplastante consiguieron dejar boquiabierto a todo el público. El setlist fue impecable, tocaron todos sus grandes temas, “Octubres Rotos”, “Animales Hambrientos”, “La ira de los hambrientos” o su ultimo himno “Heridas Abiertas”. Es innegable el buen estado de forma de la banda, dieron un concierto de ochenta minutos si realizar ninguna pausa y no pararon de brincar, saltar y tirarse al público, este respondió muy bien no dejando de moverse y de hacer Circle Pits, incluso de animaron con un Wall of death enorme.
Desakato dejó el listón muy alto, pero The Casualities se subió a las tablas con intención de comerse Oviedo. Muchos de los asistentes dejaron el recinto pero otros muchos nos quedamos para disfrutar de la mítica banda de punk/harcore, con nuevo cantante después de la repentina salida de Jorge Hernández. Los neoyorkinos no se salieron del guion, temas rápidos, largas crestas y muchísima rabia. Sonaron sus temas mas míticos como “Riot” o “Unknown the soldier”, pero se dejaron en el tintero uno de mis temas favoritos “We Are All We Have”. El volumen durante todo el festi fue excesivamente alto, pero el técnico de The Casualities se pasó cuatro pueblos, el dolor de oídos fue inevitable incluso llevando tapones.
Grave fueron una gran decepción, tenia muchas ganas de verlos, death metal sueco. ¿Qué puede salir mal?. El técnico de sonido hizo todo lo posible para hacer sonar mal a la banda. La bola de graves en todo el recinto era insufrible y el volumen estaba al once Intolerable que una banda de este nivel deje su sonido en manos de este tipo de gente. En los álbumes son capaces de fusionar el death metal con otro mucho estilo como el hardcore o el rock… aunque no fui capaz de diferenciar ni tres notas.
Con las fuerzas bajo mínimos y el cuerpo echo polvo teniendo en cuenta la hora de retraso que llevaban los bolos, enfile la salida en dirección al hotel, aunque saque fuerzas para escuchar y fotografiar los cinco primeros temas de Lendakaris Muertos.
Sábado 9 de junio
El segundo día arrancaba con la banda local Oklahoma. Aunque el público fuese muy escaso a primera hora, los ovetenses supieron sacar toda su garra y consiguieron dar un conciertazo. El público coreo con ellos todos sus temas, pero el momento cumbre llegó cuando tocaron su última canción, “Destroy Everything” de Hatebreed.
Worth It se fue a Oviedo con toda su crew y amigos notandose en primeras filas. Los hardcoretas de Berriz lo dieron todo en el escenario, tanto guitarristas como cantante no dejaron de pegar saltos y de ofrecer el micro a sus fans. Worth It nos recordaban que paraban en el OBF para presentar su segundo álbum “Better Ways” del cual sonaron unos cuantos cortes.
La banda de Death metal melódico Bloodhunter también aprovecharon el OTB para presentar “The End of Faith” su último álbum. Aunque el sonido no fue muy bueno hicieron las delicias de todos sus seguidores, que eran fácilmente reconocibles por “headbanging” constante. Diva Satanica no dio su mejor concierto, la voz no se escuchaba prácticamente, aunque la imagen de la banda encima del escenario era arrolladora.
Black Panda tampoco destacaron mucho, no les conocía y no puedo comparar la actuación del OBF con otras anteriores, pero supongo que no tuvieron su mejor día. La banda en general estaba muy estática en el escenario y los cantantes cometieron bastantes errores en cuanto a lo vocal se refiere.
The Black Panthys Party fueron los siguientes en saltar al escenario para dar volquete a todos esos personajes públicos y políticos. Las letras de todos sus temas tienen un trasfondo político, una gran forma de manifestarse. Tuvimos tiempo de reírnos, cantar y disfrutar como niños junto a ellos. Aparte de sus letras rompedoras son un grupo de punk/hardcore como la copa de un pino, con un frontman que vocalmente no fue impecable, pero si lo dio todo junto al publico estando prácticamente todo el concierto encaramado desde el foso.
La banda de hardcore Knuckeldust fueron los siguientes en saltar al escenario. Llevan muchos años subiéndose a los escenarios, han conseguido un sonido muy potente y una actitud característica del hardcore europeo. Dieron un buen repaso a todos sus álbumes tocando temas tanto antiguos como de los más nuevos. La verdad es que me pareció un concierto muy monótono y aburrido, aunque estuvieron muy cercanos con el público.
Llegábamos a la traca final y al mejor concierto del sábado según mi humilde opinión. No Turning Back saltaban al escenario con intención de comerse Oviedo. Los holandeses fueron encadenando temas uno detrás de otro sin perder ni un segundo. Según estaba sacando fotos, la cara de uno de los guitarristas se me hizo conocida, y cuando hablo en un perfecto español recordé que el guitarrista de “We Ride” iba a acompañarlos durante un tiempo. No pararon de pegar saltos y de liarla durante los 50 minutos, un hardcore con toques de punk mucho más rápido y divertido que los anteriores Knuckeldust. No dieron ni un respiro, breakdawn tras breakdawn, tema tras tema, salto tras salto, se metieron al publico en el bolsillo. Los mejores del sábado sin ninguna duda.
Desde Holanda también llegaban los death metaleros Sinister. Aunque solo quede uno miembro de su formación original no han perdido su esencia. Según saqué las fotos en los tres primeros temas y notando la bola de graves que se estaba formando y la linealidad del sonido, decidí tomarme un segundo para cenar una hamburguesa vegana dentro del festival y tomarme una merecida y helada cerveza.
Slapshot es una banda de culto dentro del hardcore. Mucha gente ni los conoce, pero en directo son capaces de maravillar a cualquier persona. Los de Boston dieron un pedazo de concierto, sobre todo Jack "Choke" Kelly, cantante de la banda, quien demostró estar en un estado de forma excepcional, física y vocalmente. Tocaron un tema tras otro, sin darnos un solo respiro. Exprimieron al máximo su hora de concierto, para presentar su nuevo álbum Make American Hate Again, pero sin olvidarse de temas más antiguos como “Big Mouth Strikes Again” o “I Told You So”.
Era innegable que Entombed A.D. eran el plato fuerte de la noche, muchísimos asistentes al festival lucían sus camisetas y parches. Era la primera vez que veía encima del escenario a esta mítica banda de death metal sueco, aunque solo quede Lars-Göran Petrov (cantante) de esa banda pionera. Los años pasan para todos, aunque Petrov siga manteniendo esa voz ronca y rota tan característica del Death Metal. Según pasaban las canciones se podían notar esos toques de punk, hardcore y rock que eredaron en los noventa que le dan un toque de frescura a temas muy oscuros. Este segundo día la organización cumplió los horarios a raja tabla, a las dos de la mañana me despedía del Otero Brutal Fest.
Este año he tenido una sensación agridulce en el Otero Brutal Fest, la organización como siempre ha sido espectacular, estando atentos a cualquier imprevisto. Las primeras bandas en pasar por el escenario me parecieron espectaculares. El fallo, desde mi humilde punto de vista ha estado en el cartel. Comparando con otros años el cartel era más humilde, con muchos grupos de culto que solo mueven a los mas puristas del género. Los cabezas de cartel no han presentado nada nuevo desde hace mucho tiempo y ya han pasado por la península anteriormente con un show y setlist prácticamente igual, no tenían nada nuevo que ofrecer. Aun así, el festival el Otero es algo más que música, y me lo pasé en grande. Espero con ansia el cartel del 2019.
¡Larga vida al Otero Brutal Fest!