Domingo 9 de Abril
Kafe Antzokia, Bilbao.
Los canadienses Monster Truck siguen ganando reputación, si con su disco debut 'Furiosity’ de 2013 consiguieron que muchos pusiesen la mirada sobre ellos, con su segundo larga duración del pasado año 2016 'Sittin’ Heavy' confirman las buenas expectativas que teníamos en este combo. Poco a poco su propuesta musical va ganando adeptos y con directos como el que pudimos disfrutar en el mítico Kafe Antzoki de Bilbo no me extraña se hagan mucho más grandes.
Una agradable y soleada tarde noche en Bilbo fue el marco perfecto para disfrutar de la actuación del cuarteto de Ontario, que traían a los alemanes The Picturebooks como teloneros. La sala mostró una aceptable asistencia, aunque ya sabemos que los domingos a veces son complicados para los conciertos en Bilbo. Luego algunos se quejan de que siempre vienen los mismos grupos, pero cuando un promotor apuesta por algo diferente, la peña no responde.
A la hora anunciada abrió la velada el singular dúo alemán The Picturebooks. Un grupo que en principio fue un trío, pero que tras la marcha del bajista, los otros dos miembros decidieron seguir adelante. Fynn Claus Grabke se encarga de la guitarra y la voz, con Philipp Mirtschink a la batería que también hace coros.
Su propuesta me cuesta etiquetarla, tal vez blues rock cavernario, un chute de potencia con una sonoridad oscura y con mucha personalidad. Yo no les conocía apenas, solo escuche su nuevo trabajo 'Home Is A Heartache' que tenemos pendiente reseñar. Lo suyo es sin duda una propuesta impactante, al menos en directo, ese impacto está garantizado. Ya hemos visto algunas bandas con este formato pero lo de estos tipos es admirable, vaya contundencia la que despliegan. La batería de Philipp no tiene platos, pero si una pequeña campana y además el tipo toca otros artilugios de percusión mientras no deja de aporrear con fiereza su singular kit de batería. Está claro que si la fuerza que transmite con su instrumento no estuviésemos hablando de un proyecto tan singular. La otra parte, el voceras y guitarra Fynn Claus Grabke usa unas vetustas guitarras acústicas enchufadas a un montón de pedales que la hacen sonar gorda y guarruza, sin perder el encanto Bluesy ni la contundencia rockera.
Una salvaje andanada de riffs y líneas de percusión que cuando menos causan asombro en la asistencia que en los primeros temas quedo aplastada por la pesadez con la que se ensañaron estos dos locos. Puede que a partir de la quinta suenen un pelin monótonos por lo atípico de su propuesta, pero lo suplen con una intensidad que desprenden en cada uno de sus gestos, se nota que lo viven intensamente y eso se transmite, te convenza o no su rollo.
Tocaron temas que conocía del nuevo disco como: "Wardance", la bluesera y oscura "Zero Fucks Given", no podía faltar la adictiva "I Need That Oooh" conocida por su videoclip, puede que una de sus piezas más accesibles. Otra del nuevo LP que tocaron fue la agreste "Bad Habits Die Hard". Recuerdo que "Cactus" del disco de 2014 'Imaginary Horse', la inicio Fynn cantando a través del micro de la guitarra. La campana de la batería sonó en "The Rabbit and the Wolf" otra atractiva composición de su disco de 2014 y si mal no recuerdo cerraron su actuación con la densa "Your Kisses Burn Like Fire". Se les vio muy animados durante todo el show, que fuera el último concierto de la gira no se notó. Son una banda atípica que merece tu atención, si tienes oportunidad de verles ni lo dudes, tienen un gran directo. Al final prometieron volver en otoño.
A las 9:45 los Monster Truck salían a escena comenzando su show con un tridente infalible conformado por "Why Are You Not Rocking?", "Old Train" y "Don’t Tell Me How to Live", una de sus canciones mas conocidas y que mejor acogida tuvo. Un fulgurante arranque que metió en harina al personal. Vaya sonidazo que tienen estos cabrones, sus riffs tienen un punch que te atrapa y la voz del bajista y cantante Jon Harvey, transmite mucho. Otros a los que no se les noto que era el último concierto de la gira. Un tour europeo en el que seguro lograron captar nuevos adeptos, su propuesta tiene todo los ingredientes para hacerse un hueco en tu alma rockera.
El guitarra Jeremy Widerman no para de moverse, aporrear su guitarra, gritar y hacer buenos coros junto a sus cuatro compañeros, esos coros son uno de los puntos fuertes de los canadienses, imposible resistirse a sus estribillos. Jeremy bajo unas cuantas veces a descargar sus solos dentro del publico. Los coros se hicieron patentes en otra de las nuevas "The Enforcer", que por momentos me recuerda a Nickelback, salvando distancias. Steve es otro contundente aporrea-tambores, el teclista Brandon se lo paso genial, como sus compis.
Despacharon un bloque de canciones del nuevo álbum, comenzando con la groovera "She's A Witch", que sonó gloriosa, para bajar las revoluciones con la blusera “Black Forest", dulce y pegadiza como el jarabe de arce y continuando con la juguetona con tintes country"For The People", otro de las buenas del nuevo disco. Brillante escuchar "Things Get Better" en directo, uf que bien les queda.
Otra mirada al debut 'Furiosity' con otro temazo blues, "For The Sun" donde Jon vuelve a bordarlo en la voz, seguida de "Seven Seas Blues" otro los temas más antiguos de su discografía. Recuperando los ganchos contundentes y grooveros en la hermosa "Sweet Mountain River", me gusta mucho el solo de guitarra esta canción. Vuelta a la actualidad con la elegante "Sweet Mountain River". Enfrentamos la última parte del bolo con su versión del clásicazo "I Got You (I Feel Good)" de James Brown, llevada a su terreno, poniendo el broche a una noche rockera de altura con "Righteous Smoke" donde los coros vuelven a tener protagonismo y terminando con "The Lion", pasando por encima de nosotros como un rebaño de bisontes americanos.
Con discos como los que están sacando y con directos como el que presenciamos, su reputación no hará más que crecer, técnica y gancho tienen a paladas.